lunes, 30 de noviembre de 2009

Llegó el momento

Hace más de veinte años que soy militante del Partido Popular y desde 1990 vengo participando de forma activa en la vida política. Tiempo suficiente para saber como transcurren las cosas y para conocer las dos caras de la moneda, pero sobre todo para darme cuenta de las oportunidades que me han otorgado, y cuanta confianza se ha depositado en mí.

Estos días hice pública una decisión que durante un tiempo me resulto difícil de tomar. Previamente me quiero remontar a otra decisión que tuvo lugar hace algo más de tres años cuando importantes dirigentes de mi Partido me pidieron que aceptara encabezar nuevamente las listas electorales a las municipales de 2007, ocho años después de haber dejado voluntariamente la alcaldía de Lugo. Por sentido de la responsabilidad y por haber estado siempre donde se me ha pedido, acepte aquel reto, tras haber figurado ya en otras ocasiones como candidato en diferentes lugares de las listas municipales de este ayuntamiento. Fui de número 3, de 1, de 25 y finalmente otra vez de 1.

A estas alturas y aproximándose ya el momento de tener que elegir los nuevos cabezas de lista para el 2011, los fantasmas de aquellas ocasiones rondaron por mi cabeza para tomar una decisión en tiempo y forma. Como siempre hay que colocar en un plato de la balanza los pros y en otro los contras. No cabrían en este artículo todos ellos, pero por encima de todo y casi desde el primer momento prevaleció la coherencia y la responsabilidad.

Soy plenamente consciente de que para que un proyecto político tenga éxito debe contar entre otras características con la capacidad de ilusionar, y para ello no podemos caer en la tentación de repetir con frecuencia a los mismos candidatos, uno no puede ser el mismo perejil para todas las salsas

Algún día los Partidos políticos y el aparato legislativo, deberán abordar muy en serio, y más pronto que tarde, el poner límite a la permanencia en los cargos y a modificar el sistema de listas por otro más fresco y democrático como las listas abiertas.

Pero mientras todo eso llega, lo que más ha prevalecido en mi decisión, además de lo ya dicho, fue ese sentimiento de querer que otras personas de mi organización puedan disponer de las oportunidades que yo he tenido, y ello no es posible sino sabemos ser generosos y apartarnos a tiempo, dejando paso a nuevas caras y nuevas ilusiones.

Mi vocación de servicio público a esta ciudad y provincia me mantiene todavía con muchas ganas de seguir aportando ideas, proyectos…, y aunque ya no sea en la arena municipal, y con profunda gratitud por tanta confianza y cariño recibido de miles de lucenses, solo puedo decir: hasta luego y aquí sigo.

_____________________________________________________________________

Chegou o momento

Fai máis de vinte anos que son militante do Partido Popular e desde 1990 veño participando de forma activa na vida política. Tempo suficiente para saber como transcorren as cousas e para coñecer as dúas caras da moeda, pero sobre todo para darme conta das oportunidades que me outorgaron, e canta confianza se depositou en min.

Estes días fixen pública unha decisión que durante un tempo resultoume difícil de tomar. Previamente quérome remontar a outra decisión que tivo lugar fai algo máis de tres anos cando importantes dirixentes do meu Partido pedíronme que aceptase encabezar novamente as listas electorais ás municipais de 2007, oito anos logo de deixar voluntariamente a alcaldía de Lugo. Por sentido da responsabilidade e por estar sempre onde se me pediu, aceptei aquel reto, tras figurar xa noutras ocasións como candidato en diferentes lugares das listas municipais deste concello. Fun de número 3, de 1, de 25 e finalmente outra vez de 1.

A estas alturas e aproximándose xa o momento de ter que elixir os novos cabezas de lista para o 2011, as pantasmas daquelas ocasións roldaron pola miña cabeza para tomar unha decisión en tempo e forma. Como sempre hai que colocar nun prato da balanza os proles e noutro os contras. Non caberían neste artigo todos eles, pero por encima de todo e case desde o primeiro momento prevaleceu a coherencia e a responsabilidade.

Son plenamente consciente de que para que un proxecto político teña éxito debe contar entre outras características coa capacidade de ilusionar, e para iso non podemos caer na tentación de repetir con frecuencia aos mesmos candidatos, un non pode ser o mesmo perexil para todas as salsas

Algún día os Partidos políticos e o aparello lexislativo, deberán abordar moi en serio, e máis pronto que tarde, o pór límite á permanencia nos cargos e a modificar o sistema de listas por outro máis fresco e democrático como as listas abertas.

Pero mentres todo iso chega, o que máis ten prevalecido na miña decisión, ademais do xa dito, foi ese sentimento de querer que outras persoas da miña organización poidan dispor das oportunidades que eu tiven, e iso non é posible senón sabemos ser xenerosos e apartarnos a tempo, deixando paso a novas caras e novas ilusións.

A miña vocación de servizo público a esta cidade e provincia mantenme aínda con moitas ganas de seguir achegando ideas, proxectos..., e aínda que xa non sexa na area municipal, e con profunda gratitude por tanta confianza e agarimo recibido de miles de lucenses, só podo dicir: ata logo e aquí sigo.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Saber priorizar

Gobernar es tomar decisiones, y yo añado que también es saber priorizar.

En tiempos de recursos escasos y de crisis económica generalizada en todo el territorio español, los ayuntamientos son las administraciones más afectadas. Por ello, el gobierno de España dijo que aprobaba y ponía en marcha, primero, el Plan de Inversión Local y, ahora, el Fondo Estatal de Inversión Local (FIEL). La finalidad anunciada era sacar del paro a miles de desempleados.

No recordaré, aquí y ahora, que estas medidas fueron calificadas de pan para hoy y hambre para mañana. Después vinieron los ya famosamente sobredimensionados carteles de dichas obras y el levantamiento de aceras por España adelante, hubiera poca, mucha o nada de necesidad: véase aquí en Lugo el ejemplo más cercano con la Avenida de Ramón Ferreiro. Había que hacer ruido y levantar polvo, que se notara actividad. Y eso vive Dios que lo han conseguido.

Ahora con el segundo de estos fondos el Ayuntamiento de Lugo presentó hace unos días, de palabra no vayamos a gastar papel, una propuesta para invertir más de 10 millones de euros. De todas las obras que se pretenden acometer, llama la atención, al menos a este humilde servidor, que en sólo dos conceptos se gaste casi todo el botín: cerrar el Parque Rosalía de Castro con verja (2.400.000€) y adquirir los elementos para dotaciones del futuro Museo Interactivo de Historia de Lugo, el MIHL, otros 2.400.000€.

Llegados a este punto, y sin entrar a cuestionar si hay que cerrar o no el parque, o si hay que “amueblar” un museo que nuestro alcalde abandera como el boom que nos sacará de la catarsis turística y económica, sí tengo muy claro que no se pueden dedicar cerca del 50% de los recursos de todo el Plan a dos obras. Y lo tengo claro, porque en la poca información facilitada y disponible, se reconoce que hay muchas calles en Lugo con deficiente iluminación, con problemas de abastecimiento de agua o sin aceras. Estos tres conceptos parecen a todas luces más básicos y de ineludible disposición para cualquier vecino y, por tanto, prioritarios en cualquier plan de choque que se quiera llevar a cabo en nuestra ciudad.

Esto se hace y se produce porque los mecanismos de control por parte de los ciudadanos, ante los despilfarros de quienes tienen la obligación de hacer un buen uso de lo que se recauda, son prácticamente inexistentes. La sociedad no sólo debe escandalizarse ante las noticias de corrupción. Debe reaccionar ante el mal uso de lo nuestro, y digo nuestro porque hablamos del dinero de todos. Y máxime en tiempos en los que estos dineros son escasos. Por ello, en estas líneas, quiero dejar muy claro que un buen gobernante es el que toma decisiones que tienen en cuenta las necesidades prioritarias de una sociedad, y las antepone a caprichos o proyectos de dudoso servicio público con la idea de pasar a la posteridad.

Aquí viene a cuento aquella frase de R.Steele Es grande solamente el que puede prescindir del aplauso y del favor de la multitud.

____________________________________________________________________________


Saber priorizar


Gobernar é tomar decisións, e eu engado que tamén é saber priorizar.

En tempos de recursos escasos e de crise económica xeneralizada en todo o territorio español, os concellos son as administracións máis afectadas. Por iso, o goberno de España dixo que aprobaba e puña en marcha, primeiro, o Plan de Investimento Local e, agora, o Fondo Estatal de Investimento Local (FIEL). A finalidade anunciada era sacar do paro a miles de desempregados.

Non recordarei, aquí e agora, que estas medidas foron cualificadas de pan para hoxe e fame para mañá. Despois viñeron os xa famosamente sobredimensionados carteis das devanditas obras e o levantamento de beirarrúas por España adiante, houbese pouca, moita ou nada de necesidade: véxase aquí en Lugo o exemplo máis próximo coa Avenida de Ramón Ferreiro. Había que facer ruído e levantar po, que se notase actividade. E iso vive Deus que o conseguiron.

Agora co segundo destes fondos o Concello de Lugo presentou hai uns días, de palabra non vaiamos gastar papel, unha proposta para investir máis de 10 millóns de euros. De todas as obras que se pretenden acometer, chama a atención, polo menos a este humilde servidor, que en só dous conceptos gástese case todo o botín: pechar o Parque Rosalía de Castro con enreixado (2.400.000€) e adquirir os elementos para dotacións do futuro Museo Interactivo de Historia de Lugo, o MIHL, outros 2.400.000€.

Chegados a este punto, e sen entrar a cuestionar se hai que pechar ou non o parque, ou se hai que "amoblar" un museo que o noso alcalde abandera como o boom que nos sacará da catarse turística e económica, si teño moi claro que non se poden dedicar cerca do 50% dos recursos de todo o Plan a dúas obras. E téñoo claro, porque na pouca información facilitada e dispoñible, recoñécese que hai moitas rúas en Lugo con deficiente iluminación, con problemas de abastecemento de auga ou sen beirarrúas. Estes tres conceptos parecen de xeito evidente máis básicos e de ineludible disposición para calquera veciño e, xa que logo, prioritarios en calquera plan de choque que se queira levar a cabo na nosa cidade.

Isto faise e prodúcese porque os mecanismos de control por parte dos cidadáns, ante os despilfarros de quen teñen a obrigación de facer un bo uso do que se recada, son practicamente inexistentes. A sociedade non só debe escandalizarse ante as noticias de corrupción. Debe reaccionar ante o mal uso do noso, e digo noso porque falamos do diñeiro de todos. E máxime en tempos nos que estes diñeiros son escasos. Por iso, nestas liñas, quero deixar moi claro que un bo gobernante é o que toma decisións que teñen en conta as necesidades prioritarias dunha sociedade, e anteponas a caprichos ou proxectos de dubidoso servizo público coa idea de pasar á posteridade.

Aquí vén a conto aquela frase de R.Steele É grande soamente o que pode prescindir do aplauso e do favor da multitude.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Un abrazo a la Muralla

El diccionario de la Real Academia Española atribuye a la palabra ‘abrazar’ varias acepciones entre ellas «estrechar entre los brazos en señal de cariño». Cuando queremos expresar nuestro afecto a alguien a quien queremos, no lo dejamos para el próximo año, lo hacemos cuando tenemos la primera oportunidad.

A un monumento de más de 2 Km. de perímetro no puede, alguien sólo, darle un abrazo pero para eso se inventaron las cadenas humanas, que volviendo al diccionario, se definen como «conjunto de personas que se enlazan cogiéndose de las manos en la danza o en otras ocasiones».

A estas alturas del artículo, los que lleguen hasta aquí se preguntarán por qué hablo de esto, y no les mantengo las dudas por más tiempo. En el pleno municipal del pasado lunes defendí la necesidad de testimoniar mediante un gran abrazo colectivo, nuestra gratitud al principal monumento que tiene Lugo, al único declarado Patrimonio de la Humanidad.

Siempre pensé que todas las iniciativas referentes a la Muralla deberían contar con todo el apoyo social y político de la ciudad, por eso en diciembre de 2008 conseguimos que el pleno municipal acordara que con seis meses de antelación todos los grupos municipales fueran convocados a reunirse para preparar de forma consensuada los eventos correspondientes. Nunca se celebró tal reunión.

En el pleno de hace unos días horas el gobierno municipal rechazó organizar el abrazo colectivo de los lucenses a la Muralla con 2 únicos argumentos: necesitan tiempo y dinero. El tiempo no lo quisieron tener cuando lo había, pero bien que le sobró a nuestro alcalde tiempo cuando, de forma improvisada y por su cuenta, convocó hace pocas fechas a todos los lucenses a limpiar la Muralla. No fue un gesto de unión sino para enfrentarnos al gobierno gallego. En cuanto al dinero sólo decir que se gasta a espuertas, sin rubor.

En el pleno municipal se dijo que la iniciativa que proponía el Partido Popular podía salir mal, y eso es lo grave, que aquí y una vez más, hay miedo y falta de liderazgo para plantear y defender los temas que saquen a Lugo de la apatía y de la falta de ideas que la proyecten más allá de Piedrafita. Los segovianos, hace unas semanas, organizaron un abrazo colectivo a su acueducto en la onomástica correspondiente. La repercusión fue importante en los medios de comunicación nacionales. Pero en Lugo, por estar en las manos que estamos, y como la idea no se les ocurrió a los que gobiernan la ciudad, hay que aparcar las propuestas ajenas, vengan de donde vengan, y a mirar para otro lado.

Aquel célebre «conseguímolo entre todos» tendremos que cambiarlo, cuando con estas actitudes consigan que ya nadie se acuerde ni sepa que Lugo tiene un monumento Patrimonio de la Humanidad, por «lo consiguió usted solo».

__________________________________________________________

Un abrazo á Muralla

O dicionario da Real Academia Española atribúe á palabra “abrazar” varias acepcións entre elas «estreitar entre os brazos en sinal de agarimo». Cando queremos expresar o noso afecto a alguén a quen queremos, non o deixamos para o próximo ano, facémolo cando temos a primeira oportunidade.

A un monumento de máis de 2 Km. de perímetro non pode, alguén só, darlle un abrazo pero para iso inventáronse as cadeas humanas, que volvendo ao dicionario, defínense como «conxunto de persoas que se enlazan colléndose das mans na danza ou noutras ocasións».

A estas alturas do artigo, os que cheguen ata aquí preguntaranse por que falo disto, e non lles manteño as dúbidas por máis tempo. No pleno municipal do pasado luns defendín a necesidade de testemuñar mediante un gran abrazo colectivo, a nosa gratitude ao principal monumento que ten Lugo, ao único declarado Patrimonio da Humanidade.

Sempre pensei que todas as iniciativas referentes á Muralla deberían contar con todo o apoio social e político da cidade, por iso en decembro de 2008 conseguimos que o pleno municipal acordase que con seis meses de antelación todos os grupos municipais fosen convocados a reunirse para preparar de forma consensuada os eventos correspondentes. Nunca se celebrou tal reunión.

No pleno de hai uns días horas o goberno municipal rexeitou organizar o abrazo colectivo dos lucenses á Muralla con 2 únicos argumentos: necesitan tempo e diñeiro. O tempo non o quixeron ter cando o había, pero ben que lle sobrou ao noso alcalde tempo cando, de forma improvisada e pola súa conta, convocou hai poucas datas a todos os lucenses a limpar a Muralla. Non foi un xesto de unión senón para enfrontarnos ao goberno galego. En canto ao diñeiro só dicir que se gasta a espuertas, sen rubor.

No pleno municipal díxose que a iniciativa que propuña o Partido Popular podía saír mal, e iso é o grave, que aquí e unha vez máis, hai medo e falta de liderado para expor e defender os temas que saquen a Lugo da apatía e da falta de ideas que a proxecten máis aló de Piedrafita. Os segovianos, fai unhas semanas, organizaron un abrazo colectivo ao seu acueducto na onomástica correspondente. A repercusión foi importante nos medios de comunicación nacionais. Pero en Lugo, por estar nas mans que estamos, e como a idea non se lles ocorreu aos que gobernan a cidade, hai que aparcar as propostas alleas, veñan de onde veñan, e a mirar para outro lado.

Aquel soado «conseguímolo entre todos» teremos que cambialo, cando con estas actitudes consigan que xa ninguén se acorde nin saiba que Lugo ten un monumento Patrimonio da Humanidade, por conseguiuno vostede só».

domingo, 1 de noviembre de 2009

Corrupción

Estos últimos meses han sido muchas las noticias publicadas en relación con diferentes casos y denuncias de tramas corruptas relacionadas con determinados políticos de diferentes opciones e ideologías.

La imagen de concejales, alcaldes u otros responsables públicos entrando en furgones policiales o en las dependencias judiciales, cuando no en calabozos, merece alguna reflexión.

En primer lugar esto es un problema de personas y no de la clase política en general. En segundo lugar la repercusión mediática es mucho mayor por diferentes intereses, generalmente políticos, que no entraré a valorar.

Pero lo que más me preocupa es que la actitud y conducta de unos individuos, pocos o muchos, está poniendo en una situación muy grave, y en todo caso en tela de juicio, la noble tarea del servicio público. Porque eso es y debería ser la tarea de cualquier político: trabajar por mejorar las condiciones de vida de nuestra sociedad. Cuando la ambición personal y económica se plantea en cualquier ámbito de la vida profesional de las personas, no deja de ser una lucha por la promoción y la mejora de cada uno. Pero cuando esto lo sacamos del terreno privado, las conductas de cualquier responsable público, y máxime los cargos políticos de cualquier índole, deben estar sometidos el mayor rigor y total transparencia. Es aquello de la mujer del Cesar.

Tengo que reconocer que, de seguir en esta dirección y volver a ser testigos diarios de estos bochornosos espectáculos, cada día se hace más difícil dar la cara como político ante la sociedad, y máxime cuando esta sociedad lo está pasando realmente muy mal por la situación de crisis económica y laboral.

Sin duda alguna, todo el rigor y el peso de la ley a quien practica toda clase de corruptelas, pero a todos con la misma vara de medir.

_____________________________________________________________________________

Corrupción

Estes últimos meses foron moitas as noticias publicadas en relación con diferentes casos e denuncias de tramas corruptas relacionadas con determinados políticos de diferentes opcións e ideoloxías.

A imaxe de concelleiros, alcaldes ou outros responsables públicos entrando en furgóns policiais ou nas dependencias xudiciais, cando non en calabozos, merece algunha reflexión.

En primeiro lugar isto é un problema de persoas e non da clase política en xeral. En segundo lugar a repercusión mediática é moito maior por diferentes intereses, xeralmente políticos, que non entrarei a valorar.

Pero o que máis me preocupa é que a actitude e conduta duns individuos, poucos ou moitos, está a por nunha situación moi grave, e en todo caso en cuestión, a nobre tarefa do servizo público. Porque iso é e debería ser a tarefa de calquera político: traballar por mellorar as condicións de vida da nosa sociedade. Cando a ambición persoal e económica exponse en calquera ámbito da vida profesional das persoas, non deixa de ser unha loita pola promoción e a mellora de cada un. Pero cando isto o sacamos do terreo privado, as condutas de calquera responsable público, e máxime os cargos políticos de calquera índole, deben estar sometidos o maior rigor e total transparencia. É aquilo da muller do Cesar.

Teño que recoñecer que, de seguir nesta dirección e volver ser testemuñas diarias destes bochornosos espectáculos, cada día faise máis difícil dar a cara como político ante a sociedade, e máxime cando esta sociedade o está a pasar realmente moi mal pola situación de crise económica e laboral.

Sen ningunha dúbida, todo o rigor e o peso da lei a quen practica toda clase de corruptelas, pero a todos coa mesma vara de medir.