He tenido la oportunidad de escuchar en vivo y en directo a Mariano Rajoy en la mañana de este domingo 24 de enero en el que para mí fue uno de los discursos más vibrantes y mejor construidos que le he escuchado.
Dejando al margen cuestiones menores, me quedo con la parte relacionada con subrayar que esta crisis que atraviesa España no sólo es derivada de cuestiones económicas y financieras, sino que tiene una componente importante en lo que durante estos 5 últimos años ha supuesto una perdida de determinados valores que han traído la cultura del mínimo esfuerzo, del rápido enriquecimiento, de la falta de una educación responsable...
Dijo Rajoy: “"España tiene que recuperar valores como el del trabajo bien hecho, la austeridad, el espíritu de superación frente a los obstáculos, el esfuerzo, el mérito y eso que llamamos espíritu cívico que no es sino la responsabilidad que nos impulsa a contribuir al bien común. Todos estos valores están en crisis y demandan con urgencia su propio plan de rescate".
En resumen, el rescate de los viejos valores y la necesidad de que los españoles vuelvan a tener ilusión ocuparon la mayoría de los mensajes de su intervención.
Con un repaso de los principales valores abandonados por Zapatero y su gobierno, Mariano Rajoy nos dijo que hay motivos para la esperanza y que lo primero es la sociedad española, por lo que nos pidió que nos ofrezcamos a la sociedad española para ayudar a resistir el cerco de la incertidumbre, vencer la angustia y romper el desamparo que tantos sienten ante la crisis en estos difíciles momentos.
Esta actitud responsable, contrasta con la frivolidad y la prepotencia con la que nuestro gobierno quiere seguir dando la espalda a los problemas que cada día angustian a nuestra sociedad. Es evidente que se engañó hace meses, y que se ocultaron las cifras que evidenciaban lo que ya teníamos encima, y se negaron a recibir y aceptar las propuestas de aquellos que en situaciones similares sacaron a España de la anterior crisis, la del 96, también generada por un gobierno socialista.
La crisis no son los números rojos de la economía sino los sueños rotos de muchos españoles, afirmó Rajoy, para terminar diciendo que cada negocio cerrado y cada empleo perdido es un motivo para pedir al señor Zapatero una rectificación completa de su política y una razón para exigir un urgente cambio de rumbo.
Es cierto que lo que no podemos es perder, además de todo este tiempo, ya irrecuperable, transcurrido sin adoptar medidas, la necesaria ilusión para salir de esta situación. Y esto es lo que Mariano Rajoy y todo el Partido Popular ofrecen a la sociedad, trabajo serio, ilusión y esperanza a todos los emprendedores que arriesgándolo todo quieren ayudar a su país. Que cunda el ejemplo.
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Novo Patriotismo
Tiven a oportunidade de escoitar en vivo e en directo a Mariano Rajoy na mañá deste domingo 24 de xaneiro no que para min foi un dos discursos máis vibrantes e mellor construídos que lle escoitei.
Deixando á marxe cuestións menores, quédome coa parte relacionada con subliñar que esta crise que atravesa España non só é derivada de cuestións económicas e financeiras, senón que ten unha compoñente importante no que durante estes 5 últimos anos supuxo unha perdida de determinados valores que trouxeron a cultura do mínimo esforzo, do rápido enriquecemento, da falta dunha educación responsable...
Dixo Rajoy: "España ten que recuperar valores como o do traballo ben feito, a austeridade, o espírito de superación fronte aos obstáculos, o esforzo, o mérito e iso que chamamos espírito cívico que non é senón a responsabilidade que nos impulsa a contribuír ao ben común. Todos estes valores están en crises e demandan con urxencia o seu propio plan de rescate".
En resumo, o rescate dos vellos valores e a necesidade de que os españois volvan ter ilusión ocuparon a maioría das mensaxes da súa intervención.
Cun repaso dos principais valores abandonados por Zapatero e o seu goberno, Mariano Rajoy díxonos que hai motivos para a esperanza e que o primeiro é a sociedade española, polo que nos pediu que nos ofrezamos á sociedade española para axudar a resistir o cerco da incerteza, vencer a angustia e romper o desamparo que tantos senten ante a crise nestes difíciles momentos.
Esta actitude responsable, contrasta coa frivolidade e a prepotencia coa que o noso goberno quere seguir dando as costas aos problemas que cada día angustian á nosa sociedade. É evidente que se enganou fai meses, e que se ocultaron as cifras que evidenciaban o que xa tiñamos encima, e negáronse a recibir e aceptar as propostas daqueles que en situacións similares sacaron a España da anterior crise, a do 96, tamén xerada por un goberno socialista.
A crise non son os números vermellos da economía senón os soños rotos de moitos españois, afirmou Rajoy, para terminar dicindo que cada negocio pechado e cada emprego perdido é un motivo para pedir ao señor Zapatero unha rectificación completa da súa política e unha razón para esixir un urxente cambio de rumbo.
É certo que o que non podemos é perder, ademais de todo este tempo, xa irrecuperable, transcorrido sen adoptar medidas, a necesaria ilusión para saír desta situación. E isto é o que Mariano Rajoy e todo o Partido Popular ofrecen á sociedade, traballo serio, ilusión e esperanza a todos os emprendedores que arriscándoo todo queren axudar ao seu país. Que renda o exemplo.
Dejando al margen cuestiones menores, me quedo con la parte relacionada con subrayar que esta crisis que atraviesa España no sólo es derivada de cuestiones económicas y financieras, sino que tiene una componente importante en lo que durante estos 5 últimos años ha supuesto una perdida de determinados valores que han traído la cultura del mínimo esfuerzo, del rápido enriquecimiento, de la falta de una educación responsable...
Dijo Rajoy: “"España tiene que recuperar valores como el del trabajo bien hecho, la austeridad, el espíritu de superación frente a los obstáculos, el esfuerzo, el mérito y eso que llamamos espíritu cívico que no es sino la responsabilidad que nos impulsa a contribuir al bien común. Todos estos valores están en crisis y demandan con urgencia su propio plan de rescate".
En resumen, el rescate de los viejos valores y la necesidad de que los españoles vuelvan a tener ilusión ocuparon la mayoría de los mensajes de su intervención.
Con un repaso de los principales valores abandonados por Zapatero y su gobierno, Mariano Rajoy nos dijo que hay motivos para la esperanza y que lo primero es la sociedad española, por lo que nos pidió que nos ofrezcamos a la sociedad española para ayudar a resistir el cerco de la incertidumbre, vencer la angustia y romper el desamparo que tantos sienten ante la crisis en estos difíciles momentos.
Esta actitud responsable, contrasta con la frivolidad y la prepotencia con la que nuestro gobierno quiere seguir dando la espalda a los problemas que cada día angustian a nuestra sociedad. Es evidente que se engañó hace meses, y que se ocultaron las cifras que evidenciaban lo que ya teníamos encima, y se negaron a recibir y aceptar las propuestas de aquellos que en situaciones similares sacaron a España de la anterior crisis, la del 96, también generada por un gobierno socialista.
La crisis no son los números rojos de la economía sino los sueños rotos de muchos españoles, afirmó Rajoy, para terminar diciendo que cada negocio cerrado y cada empleo perdido es un motivo para pedir al señor Zapatero una rectificación completa de su política y una razón para exigir un urgente cambio de rumbo.
Es cierto que lo que no podemos es perder, además de todo este tiempo, ya irrecuperable, transcurrido sin adoptar medidas, la necesaria ilusión para salir de esta situación. Y esto es lo que Mariano Rajoy y todo el Partido Popular ofrecen a la sociedad, trabajo serio, ilusión y esperanza a todos los emprendedores que arriesgándolo todo quieren ayudar a su país. Que cunda el ejemplo.
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Novo Patriotismo
Tiven a oportunidade de escoitar en vivo e en directo a Mariano Rajoy na mañá deste domingo 24 de xaneiro no que para min foi un dos discursos máis vibrantes e mellor construídos que lle escoitei.
Deixando á marxe cuestións menores, quédome coa parte relacionada con subliñar que esta crise que atravesa España non só é derivada de cuestións económicas e financeiras, senón que ten unha compoñente importante no que durante estes 5 últimos anos supuxo unha perdida de determinados valores que trouxeron a cultura do mínimo esforzo, do rápido enriquecemento, da falta dunha educación responsable...
Dixo Rajoy: "España ten que recuperar valores como o do traballo ben feito, a austeridade, o espírito de superación fronte aos obstáculos, o esforzo, o mérito e iso que chamamos espírito cívico que non é senón a responsabilidade que nos impulsa a contribuír ao ben común. Todos estes valores están en crises e demandan con urxencia o seu propio plan de rescate".
En resumo, o rescate dos vellos valores e a necesidade de que os españois volvan ter ilusión ocuparon a maioría das mensaxes da súa intervención.
Cun repaso dos principais valores abandonados por Zapatero e o seu goberno, Mariano Rajoy díxonos que hai motivos para a esperanza e que o primeiro é a sociedade española, polo que nos pediu que nos ofrezamos á sociedade española para axudar a resistir o cerco da incerteza, vencer a angustia e romper o desamparo que tantos senten ante a crise nestes difíciles momentos.
Esta actitude responsable, contrasta coa frivolidade e a prepotencia coa que o noso goberno quere seguir dando as costas aos problemas que cada día angustian á nosa sociedade. É evidente que se enganou fai meses, e que se ocultaron as cifras que evidenciaban o que xa tiñamos encima, e negáronse a recibir e aceptar as propostas daqueles que en situacións similares sacaron a España da anterior crise, a do 96, tamén xerada por un goberno socialista.
A crise non son os números vermellos da economía senón os soños rotos de moitos españois, afirmou Rajoy, para terminar dicindo que cada negocio pechado e cada emprego perdido é un motivo para pedir ao señor Zapatero unha rectificación completa da súa política e unha razón para esixir un urxente cambio de rumbo.
É certo que o que non podemos é perder, ademais de todo este tempo, xa irrecuperable, transcorrido sen adoptar medidas, a necesaria ilusión para saír desta situación. E isto é o que Mariano Rajoy e todo o Partido Popular ofrecen á sociedade, traballo serio, ilusión e esperanza a todos os emprendedores que arriscándoo todo queren axudar ao seu país. Que renda o exemplo.