Se acaba de producir la apertura solemne de la X Legislatura presidida por SSMM los Reyes de España. El importante evento coincide en el tiempo con fechas muy navideñas y por tanto con el momento de arrancar las ultimas hojas del calendario de este año para dar paso al 2012.
Sin duda son instantes de fuertes contrastes dentro de la normalidad democrática, pero días de enorme actividad a pesar de estar en Navidad.
Personalmente creo que España necesitaba esta actividad. Había ganas de que alguien por fin se pusiera al timón y comenzara a tomar medidas, ganas de sentir que hay un Gobierno. A pesar de las fechas se nombraron Ministros y se les puso tarea de inmediato, se celebró un primer consejo de ministros y en dos días se celebrará el segundo, con contenidos importantes como la prórroga de los Presupuestos Generales del Estado, la actualización del poder adquisitivo de las pensiones a partir del 1 de enero próximo, y un importante paquete de medidas económicas con un calendario de aplicación.
Ya están anunciados los plazos para cumplir con las principales promesas electorales del Partido Popular. Así, el gobierno presentará los Presupuestos Generales del Estado para 2012, antes del 31 de marzo. Durante el próximo mes de enero presentará la Ley de Estabilidad Presupuestaria que permitirá desarrollar la reforma constitucional y en la que se establecerán los criterios para reducir de manera progresiva el nivel de nuestra deuda hasta el año 2020, fijar en un 0,4% el déficit estructural global máximo del conjunto de las distintas Administraciones Públicas a partir del 2020, o regular la distribución de los límites de déficit y de deuda entre las distintas Administraciones Públicas, así como la responsabilidad de cada una de ellas en caso de incumplimiento de estos nuevos objetivos. Sirvan sólo de muestra y ejemplo del trabajo y de los compromisos que ya empiezan a cumplirse. Aunque estemos en Navidad.
El turrón, la lotería y el cava se mezclan con los nombramientos, las tomas de posesión, los Decretos, el BOE o los discursos institucionales como el de Don Juan Carlos. Fuertes contrastes entre la emoción del reencuentro en casa con los que están fuera el resto del año y las caras nuevas que poco a poco se irán haciendo un hueco en los telediarios que vemos día tras día. Contrastes entre los momentos íntimos de la Nochebuena y Navidad, y el día a día de cualquier mes del año, de la actividad política que por momentos interesa, y en ocasiones hastía y se aborrece.
Pronto nos tomaremos las 12 uvas y nos abrazaremos y besaremos deseándonos un nuevo año cargado de buenas intenciones, noticias y salud. Y ya con la hoja de enero en el calendario, esas nuevas caras se irán haciendo más familiares y nos irán desgranando las medidas que se tomarán, dolorosas pero espero entendibles.
Contrastes do Nadal
Acábase de producir a apertura solemne da X Lexislatura presidida por SSMM os Reis de España. O importante evento coincide no tempo con datas moi do Nadal e xa que logo co momento de arrincar ultímalas follas do calendario deste ano para dar paso ao 2012.
Sen dúbida son instantes de fortes contrastes dentro da normalidade democrática, pero días de enorme actividade a pesar de estar en Nadal.
Persoalmente creo que España necesitaba esta actividade. Había ganas de que alguén por fin se puxese ao temón e comezase a tomar medidas, ganas de sentir que hai un Goberno. A pesar das datas nomeáronse Ministros e púxoselles tarefa de inmediato, celebrouse un primeiro consello de ministros e en dous días celebrarase o segundo, con contidos importantes como a prórroga dos Orzamentos Xerais do Estado, a actualización do poder adquisitivo das pensións a partir do 1 de xaneiro próximo, e un importante paquete de medidas económicas cun calendario de aplicación.
Xa están anunciados os prazos para cumprir coas principais promesas electorais do Partido Popular. Así, o goberno presentará os Orzamentos Xerais do Estado para 2012, antes do 31 de marzo. Durante o próximo mes de xaneiro presentará a Lei de Estabilidade Orzamentaria que permitirá desenvolver a reforma constitucional e na que se establecerán os criterios para reducir de xeito progresivo o nivel da nosa débeda ata o ano 2020, fixar nun 0,4% o déficit estrutural global máximo do conxunto das distintas Administracións Públicas a partir do 2020, ou regular a distribución dos límites de déficit e de débeda entre as distintas Administracións Públicas, así como a responsabilidade de cada unha delas en caso de incumprimento destes novos obxectivos. Sirvan só de mostra e exemplo do traballo e dos compromisos que xa empezan a cumprirse. Aínda que esteamos en Nadal.
O turrón, a lotería e o cava mestúranse cos nomeamentos, as tomas de posesión, os Decretos, o BOE ou os discursos institucionais como o de Don Juan Carlos. Fortes contrastes entre a emoción do reencontro en casa cos que están fose o resto do ano e as caras novas que aos poucos se irán facendo un oco nos telexornais que vemos día tras día. Contrastes entre os momentos íntimos da Noiteboa e Nadal, e o día a día de calquera mes do ano, da actividade política que por momentos interesa, e en ocasións hastía e se aborrece.
Pronto nos tomaremos as 12 uvas e abrazarémonos e bicaremos desexándonos un novo ano cargado de boas intencións, noticias e saúde. E xa coa folla de xaneiro no calendario, esas novas caras iranse facendo máis familiares e irannos debullando as medidas que se tomarán, dolorosas pero espero entendibles.