miércoles, 27 de noviembre de 2024

Maldita burocracia

Me revuelve el cuerpo, como supongo que a muchas personas, escuchar a los miles de afectados por las terribles consecuencias de la devastación de los pueblos y barrios afectados por las riadas de hace unas semanas, y escucharles decir que todavía no les han llegado las ayudas monetarias prometidas por unos y por otros.

Me parece inadmisible que la burocracia no pueda olvidarse por un día de sus complejas tramitaciones y exigencias en situaciones puntuales como estas. Pedir documentos, facturas, fotos...  a personas que han perdido hasta el último de los papeles parece un insulto hacia ellos, una ofensa que se suma a su dolor e impotencia.

La burocracia viene suponiendo un freno al desarrollo de muchas actividades e iniciativas, causando impacto en nuestro día a día. Perdemos horas en realizar trámites administrativos simples, como renovar documentación, pagar tasas municipales e impuestos. Los autónomos y pequeños emprendedores se ven obligados a la contratación de servicios profesionales para cumplir con sus obligaciones legales para no recibir sanciones desproporcionadas. Todos, en mayor o menor medida, hemos tenido cierta sensación de impotencia al reflexionar sobre como las instituciones que deberían protegernos están cada vez más lejanas, más desconectadas de nosotros por las barreras burocráticas que ellas mismas crean.

A esas sensaciones se suman también los miedos y la desconfianza a compartir datos personales en las plataformas digitales a las que las administraciones nos obligan a acudir cada vez con mayor intensidad. Temor a la falta de seguridad y privacidad, a caer en las ciber estafas que son noticia diaria.

Hasta no hace mucho, lo frecuente era ir a resolver un trámite administrativo a unas dependencias donde podías sentarte y explicarle tu problema a una persona que con suerte y buena voluntad te ayudaba a entender los trámites que se necesitaban y la documentación que se requería. Hoy la digitalización, de obligada implantación en muchos de aquellos trámites, ha provocado enormes dificultades, bien por la falta de acceso a internet de calidad o por no disponer de capacidad económica para tener dispositivos tecnológicos punteros y actualizados, y todo ello sin entrar en la desigualdad generacional a la hora de realizar trámites en línea. Se ha evidenciado que gran parte de la población no esta capacitada para manejar estas plataformas digitales, y tampoco tendrían por qué estarlo.

Pero si en las ciudades la brecha digital presenta problemas, cuando nos trasladamos a nuestras zonas rurales, tan extendidas en nuestro territorio y provincia, el panorama que nos encontramos todavía es más grave. Las explotaciones agrarias están sometidas a un exceso de regulaciones y a normativas desproporcionadas y complejas que alejan a nuestros agricultores y ganaderos de sus tareas habituales y necesarias, los hacen menos competitivos, dedicando sus escasos recursos a gastarlos en papeleo. Incluso las ayudas y subsidios agrarios están bajo normas complejas y cada día más exigentes. En definitiva, el éxodo rural, el abandono de las pequeñas y medianas explotaciones familiares, tiene mucho que ver con toda esa burocracia mal diseñada y orientada.

Quizás por estas razones, Julián, el protagonista de este año en el anuncio de la Lotería de Navidad se sienta solo. Maldita burocracia. 

Maldita burocracia

Revólveme o corpo, como supoño que a moitas persoas, escoitar aos miles de afectados polas terribles consecuencias da devastación dos pobos e barrios afectados polas riadas de hai unhas semanas, e escoitarlles dicir que aínda non lles chegaron as axudas monetarias prometidas por uns e por outros.

Paréceme inadmisible que a burocracia non poida esquecerse por un día das súas complexas tramitacións e esixencias en situacións puntuais como estas. Pedir documentos, facturas, fotos...  a persoas que perderon ata o último dos papeis parece un insulto cara a eles, unha ofensa que se suma á súa dor e impotencia.

A burocracia vén supoñendo un freo ao desenvolvemento de moitas actividades e iniciativas, causando impacto no noso día a día. Perdemos horas en realizar trámites administrativos simples, como renovar documentación, pagar taxas municipais e impostos. Os autónomos e pequenos emprendedores ven obrigados á contratación de servizos profesionais para cumprir coas súas obrigacións legais para non recibir sancións desproporcionadas. Todos, en maior ou menor medida, tivemos certa sensación de impotencia ao reflexionar sobre como as institucións que deberían protexernos están cada vez máis afastadas, máis desconectadas de nós polas barreiras burocráticas que elas mesmas crean.

A esas sensacións súmanse tamén os medos e a desconfianza para compartir datos persoais nas plataformas dixitais ás que as administracións nos obrigan a acudir cada vez con maior intensidade. Temor á falta de seguridade e privacidade, a caer nas ciber estafas que son noticia diaria.

Ata non fai moito, o frecuente era ir resolver un trámite administrativo a unhas dependencias onde podías sentarche e explicarlle o teu problema a unha persoa que con sorte e boa vontade axudábache a entender os trámites que se necesitaban e a documentación que se requiría. Hoxe a dixitalización, de obrigada implantación en moitos daqueles trámites, provocou enormes dificultades, ben pola falta de acceso a internet de calidade ou por non dispoñer de capacidade económica para ter dispositivos tecnolóxicos punteiros e actualizados, e todo iso sen entrar na desigualdade xeracional á hora de realizar trámites en liña. Evidenciouse que gran parte da poboación non esta capacitada para manexar estas plataformas dixitais, e tampouco terían por que estalo.

Pero se nas cidades a fenda dixital presenta problemas, cando nos trasladamos ás nosas zonas rurais, tan estendidas no noso territorio e provincia, o panorama que nos atopamos aínda é máis grave. As explotacións agrarias están sometidas a un exceso de regulacións e a normativas desproporcionadas e complexas que afastan aos nosos agricultores e gandeiros das súas tarefas habituais e necesarias, fanos menos competitivos, dedicando os seus escasos recursos a gastalos en papelada. Incluso as axudas e subsidios agrarios están baixo normas complexas e cada día máis esixentes. En definitiva, o éxodo rural, o abandono das pequenas e medianas explotacións familiares, ten moito que ver con toda esa burocracia mal deseñada e orientada.

Quizais por estas razóns, Julián, o protagonista deste ano no anuncio da Lotería de Nadal senta só. Maldita burocracia.


miércoles, 13 de noviembre de 2024

Aprender la lección

Han transcurrido 15 días desde que nuestras retinas quedaron fuertemente impactadas por las imágenes que a través de los medios de comunicación llegaban desde las provincias de Albacete y Valencia. 

Me temo que, como ya ha ocurrido en otras grandes desgracias como con la destructora lava del volcán de la isla canaria de La Palma, las promesas de ayudas “por tierra, mar y aire” y “todo el tiempo que hagan falta” podrían correr la misma suerte que en aquella isla donde, tres años después, cientos de ciudadanos siguen viviendo en contenedores, sin recibir las ayudas prometidas o sin poder volver a rehacer sus vidas.

Pero además del impacto emocional por la pérdida para siempre de más de 220 personas y decenas de desaparecidos, a lo que hay que sumar la destrucción de hogares y negocios, vehículos y puestos de trabajo, todo ello aderezado por el desastroso comportamiento de algunos responsables políticos que no han sabido estar a la altura de los graves sucesos.

No es el momento de dirimir responsabilidades, es tiempo de concentrar todos los esfuerzos en localizar a los que están desaparecidos y devolver la normalidad a los barrios y pueblos arrasados. 

Salvando las distancias y diferencias en cuanto a la magnitud de la tragedia, no he podido evitar acordarme de lo que viví cuando en 1996 una rotura en una tubería de uno de los depósitos de agua situado en el barrio de A Piringalla de Lugo, provocó que unos 15.000 litros de agua corrieran pendiente abajo hasta llegar a un edificio con 87 viviendas inundando en pocos minutos el sótano dedicado a garajes en una hora en la que muchos comenzaban su actividad diaria. El edificio fue desalojado y hasta tuvieron que intervenir los buzos de la Guardia Civil para comprobar que no hubiese gente atrapada en los garajes.

Como alcalde permanecí allí desde primera hora de la mañana hasta bien entrada la noche, tranquilizando a los vecinos desalojados, buscando lugares para que fuesen a comer y cenar, hoteles donde alojarlos hasta que los técnicos certificaran que no había daños estructurales.

Creo que aquel día comprobé la importancia de estar al lado de los que necesitan ver que hay personas ocupándose de sus problemas. No lo digo para darme importancia, ya estoy fuera de la política y jubilado. Lo recuerdo porque estoy seguro que a muchos vecinos afectados por la catástrofe reciente les hubiese gustado ver, sentir y escuchar de cerca a quienes tienen herramientas y medios para consolar y dar solución a sus desgracias.

Tiempo habrá de juzgar los diferentes comportamientos de unos y otros, de aquellos que se lavaron las manos con absoluto tacticismo político viendo la oportunidad de que un presidente autonómico de diferente color político se cociera en su salsa sin desplegar desde el Estado toda la ayuda necesaria, y de aquellos que han demostrado con su falta de explicaciones y de su incapacidad de gestión no estar a la altura de lo que de ellos podía esperarse.

No es aceptable escuchar a un presidente de gobierno decir “si quieren ayuda, que la pidan”, y verlo huir de situaciones incomodas ante vecinos llenos de rabia, ni tampoco a un presidente autonómico alejado del centro de coordinación en los momentos iniciales y decisivos. Sólo espero que aprendieran la lección y que sean los ciudadanos, cuando llegue el momento, los que se la recuerden.

Aprender a lección

Transcorreron 15 días desde que as nosas retinas quedaron fortemente impactadas polas imaxes que a través dos medios de comunicación chegaban desde as provincias de Albacete e Valencia. 

Témome que, como xa ocorreu noutras grandes desgrazas como coa destrutora lava do volcán da illa canaria da Palma, as promesas de axudas “por terra, mar e aire” e “todo o tempo que fagan falta” poderían correr a mesma sorte que naquela illa onde, tres anos despois, centos de cidadáns seguen vivindo en contedores, sen recibir as axudas prometidas ou sen poder volver refacer as súas vidas.

Pero ademais do impacto emocional pola perda para sempre de máis de 220 persoas e decenas de desaparecidos, ao que hai que sumar a destrución de fogares e negocios, vehículos e postos de traballo, todo iso aderezado polo desastroso comportamento dalgúns responsables políticos que non souberon estar á altura dos graves sucesos.

Non é o momento de dirimir responsabilidades, é tempo de concentrar todos os esforzos en localizar aos que están desaparecidos e devolver a normalidade aos barrios e pobos arrasados. 

Salvando as distancias e diferenzas en canto á magnitude da traxedia, non puiden evitar acordarme do que vivín cando en 1996 unha rotura nunha tubaxe dun dos depósitos de auga situada no barrio da Piringalla de Lugo, provocou que uns 15.000 litros de auga corresen pendente abaixo ata chegar a un edificio con 87 vivendas asolagando en poucos minutos o soto dedicado a garaxes nunha hora na que moitos comezaban a súa actividade diaria. O edificio foi desaloxado e ata tiveron que intervir os mergulladores da Garda Civil para comprobar que non houbese xente atrapada nos garaxes.

Como alcalde permanecín alí desde primeira hora da mañá ata ben entrada a noite, tranquilizando aos veciños desaloxados, buscando lugares para que fosen comer e cear, hoteis onde aloxalos ata que os técnicos certificasen que non había danos estruturais.

Creo que aquel día comprobei a importancia de estar á beira dos que necesitan ver que hai persoas ocupándose dos seus problemas. Non o digo para darme importancia, xa estou fóra da política e xubilado. Lémbroo porque estou seguro que a moitos veciños afectados pola catástrofe recente gustoulles ver, sentir e escoitar de preto a quen ten ferramentas e medios para consolar e dar solución ás súas desgrazas.

Tempo haberá de xulgar os diferentes comportamentos duns e outros, daqueles que se lavaron as mans con absoluto tacticismo político vendo a oportunidade de que un presidente autonómico de diferente cor política cocésese na súa salsa sen despregar desde o Estado toda a axuda necesaria, e daqueles que demostraron coa súa falta de explicacións e da súa incapacidade de xestión non estar á altura do que deles podía esperarse.

Non é aceptable escoitar a un presidente de goberno dicir “se queren axuda, que a pidan”, e velo fuxir de situacións incomodas #ante veciños cheos de rabia, nin tampouco a un presidente autonómico afastado do centro de coordinación nos momentos iniciais e decisivos. Só espero que aprendesen a lección e que sexan os cidadáns, cando chegue o momento, os que lla lembren.


miércoles, 30 de octubre de 2024

Algo más que contrastes

Acostumbrados a escuchar discursos que parecen salidos de manuales de marketing, sin empatía, repletos de palabras huecas y de recetas para los demás que no se aplican quienes las pronuncian, en un entorno artificial y nada sincero, escuchar una intervención cargada de significado y palabras que invitan a la reflexión no sólo se agradece, sino que insufla esperanzas de que no todo está perdido.

Durante la ceremonia de entrega de los premios Princesa de Asturias en su edición de este 2024, la semana pasada, Felipe VI pronunció palabras que merecen atención y alguna reflexión. Me centraré en dos de esas cuestiones, su referencia a la persona y a la polarización.

Es evidente que el entorno en que nos desarrollamos y crecemos como personas se encuentra cada día más globalizado e inmerso en una sociedad muy consumista, donde el 1% más rico de la población mundial posee más riqueza que el 95%, o si a nuestro país nos ciñésemos, el 1% de la población española concentra la cuarta parte de la riqueza de España. En este contexto, como nos advierte nuestro Rey, la deshumanización es un riesgo latente por lo que debemos colocar a las personas en el centro de cualquier discurso, acción o decisión, recordándonos que es la historia la que nos alerta de las graves consecuencias de apartarnos de este camino. 

Si además de fijarnos en los conflictos bélicos que a diario ocupan una gran parte de los informativos ponemos el foco en nuestros entornos cercanos seguramente estaríamos de acuerdo en que son muchos los ejemplos percibidos sobre el desprecio, o a ignorar situaciones de desigualdad, o de injusticias. Así Felipe VI nos decía “Es, por ello, obligación de las instituciones, pero también de la sociedad civil, (de los ciudadanos), luchar contra todo aquello que se separe, siquiera un ápice, de ese respeto integral que debemos a la persona, a cualquier persona, a la dignidad de cualquier ser humano; contra todo lo que se separe de la voluntad y el compromiso de seguir construyendo sociedades capaces de convivir, dialogar y trabajar por el bien común”.

En el mismo sentido me ha parecido muy oportuna su referencia al recordar la alerta ante los graves riesgos de la polarización, del rechazo a las personas que no piensan o votan lo mismo que nosotros.

La polarización social que vivimos está contribuyendo a potenciar esto, en lugar de mitigarlo. Vemos las reiteradas actitudes de muchos de nuestros actuales gobernantes, más preocupados de mantener el poder que de aportar soluciones a los problemas de los ciudadanos, más preocupados en encontrar argumentos y estrategias de acoso y derribo al rival político que de reconocer errores propios y ajenos, más interesados en tensionar, en polarizar, en dividir entre buenos y malos que, en reconciliar y potenciar a las personas, vivan donde vivan o voten a quien voten.

En resumen, mientras nuestro Rey proyecta un mensaje conciliador y enfatiza sobre la necesidad de una voluntad integradora, de construcción colectiva y de estabilidad institucional, desde el gobierno se insiste en las estrategias divisorias y en la continua búsqueda de la confrontación ciudadana. Son algo más que contrastes.

Algo máis que contrastes

Afeitos a escoitar discursos que parecen saídos de manuais de márketing, sen empatía, repletos de palabras ocas e de receitas para os demais que non se aplican quen as pronuncia, nunha contorna artificial e nada sincero, escoitar unha intervención cargada de significado e palabras que convidan á reflexión non só se agradece, senón que insufla esperanzas de que non todo está perdido.

Durante a cerimonia de entrega dos premios Princesa de Asturias na súa edición deste 2024, a semana pasada, Felipe VI pronunciou palabras que merecen atención e algunha reflexión. Centrareime en dous desas cuestións, a súa referencia á persoa e á polarización.

É evidente que a contorna en que nos desenvolvemos e crecemos como persoas atópase cada día máis globalizado e inmerso nunha sociedade moi consumista, onde o 1% máis rico da poboación mundial posúe máis riqueza que o 95%, ou se ao noso país nos cinguísemos, o 1% da poboación española concentra a cuarta parte da riqueza de España. Neste contexto, como nos advirte o noso Rei, a deshumanización é un risco latente polo que debemos colocar ás persoas no centro de calquera discurso, acción ou decisión, lembrándonos que é a historia a que nos alerta das graves consecuencias de apartarnos deste camiño. 

Se ademais de fixarnos nos conflitos bélicos que a diario ocupan unha gran parte dos informativos poñemos o foco nas nosas contornas próximas seguramente estariamos de acordo en que son moitos os exemplos percibidos sobre o desprezo, ou a ignorar situacións de desigualdade, ou de inxustizas. Así Felipe VI dicíanos “É, por iso, obrigación das institucións, pero tamén da sociedade civil, (dos cidadáns), loitar contra todo aquilo que se separe, sequera un chisco, dese respecto integral que debemos á persoa, a calquera persoa, á dignidade de calquera ser humano; contra todo o que se separe da vontade e o compromiso de seguir construíndo sociedades capaces de convivir, dialogar e traballar polo ben común”.

No mesmo sentido pareceume moi oportuna a súa referencia ao lembrar a alerta #ante os graves riscos da polarización, do rexeitamento ás persoas que non pensan ou votan o mesmo que nós.

A polarización social que vivimos está a contribuír a potenciar isto, en lugar de mitigalo. Vemos as reiteradas actitudes de moitos dos nosos actuais gobernantes, máis preocupados de manter o poder que de achegar solucións aos problemas dos cidadáns, máis preocupados en atopar argumentos e estratexias de acoso e derriba ao rival político que de recoñecer erros propios e alleos, máis interesados en tensionar, en polarizar, en dividir entre bos e malos que, en reconciliar e potenciar ás persoas, vivan onde vivan ou voten a quen vote.

En resumo, mentres o noso Rei proxecta unha mensaxe conciliadora e salienta sobre a necesidade dunha vontade integradora, de construción colectiva e de estabilidade institucional, desde o goberno insístese nas estratexias divisorias e na continua procura da confrontación cidadá. Son algo máis que contrastes.

miércoles, 16 de octubre de 2024

Pinocho

He dado unas cuentas vueltas a mi cabeza para encontrar la manera de escribir la situación que vivimos en España en estos tiempos de políticas basadas en contradicciones, engaños y mentiras sin caer en dramatismos, y para ello voy a recurrir a las metáforas a través de un cuento, que podrá ayudarme.

¿Quién no se ha visto impactado por algunos de los cuentos que nos contaban de niños y que más tarde Disney llevó al cine? Uno de ellos, al menos en mi caso, fue la historia de Pinocho. Una historia con aspectos cómicos y otros dramáticos que deja alusiones claras a las consecuencias de mentir o por el contrario a la recompensa por las buenas obras. El progresivo crecimiento de la nariz de madera por las sucesivas mentiras, o su conversión final en niño de carne y hueso por su buena conducta resumen este histórico cuento, no exento también de momentos con tintes dramáticos.

La nariz de Pinocho crece cada vez que dice una mentira, lo que nos viene a decir que las acciones tienen consecuencias, y que cuando un político miente debería reconocer su error y tomar medidas para corregirlo. 

En este cuento a Pinocho lo engañan para ir al país de los tontos donde los niños se convierten en burros, guardando similitud con las soluciones mágicas que nos prometen a problemas complejos, y como Pinocho pronto descubriremos que la falta de responsabilidad nos sitúa más cerca de la fantasía que de la realidad.

En nuestro caso, en el comportamiento de quienes se sientan hoy en el Consejo de ministros y de quien lo preside, existe un cierto paralelismo con la historia de Pinocho. Ellos creen que lo de menos es decir la verdad, que lo único que cuenta es el relato, aunque éste no tenga autenticidad, y se equivocan. La distancia entre lo que dicen y lo que hacen, hoy por hoy, ya se mide en narices que no paran de crecer.

Como dice el refrán, “una mentira sigue creciendo y creciendo hasta que es tan evidente como la nariz de tu cara”. En nuestros gobernantes, la nariz de su cara sigue creciendo a tal velocidad que pronto se molestaran entre ellos, por muy ancha y larga que sea la mesa del Consejo de ministros. Son las consecuencias de promesas rotas y discursos alejados de la realidad que harán que terminen enredados en sus propias invenciones, que se quiebren como la madera débil, ante la presión de la realidad, lo que evidenciará que la palabra que dan solo es válida mientras sea conveniente.

En la historia de Pinocho, estudiar, trabajar y ser bueno cuidando a su padre enfermo, lo transforman en un niño de verdad. En nuestro caso, los miembros del gobierno parecen marionetas de madera que se mueven al ritmo de sus mentiras, sin caer en la cuenta de que la única forma de convertirse en personas de verdad como logró Pinocho, es contando la verdad. Cuantos hoy están haciendo de la mentira su escudo de protección nunca se convertirán en un gobierno de verdad, y al igual que a ese muñeco de madera le crecía la nariz no pudiendo ocultarla, cada mentira, cada nuevo engaño, cada intento de ocultarlo, más pronto que tarde también saldrá a la luz. Somos muchos los que lo esperamos.


Pinocho

Dei unhas contas voltas á miña cabeza para atopar a maneira de escribir a situación que vivimos en España nestes tempos de políticas baseadas en contradicións, enganos e mentiras sen caer en dramatismos, e para iso vou recorrer ás metáforas a través dun conto, que poderá axudarme.

Quen non se viu impactado por algúns dos contos que nos contaban de nenos e que máis tarde Disney levou ao cinema? Un deles, polo menos no meu caso, foi a historia de Pinocho. Unha historia con aspectos cómicos e outros dramáticos que deixa alusións claras ás consecuencias de mentir ou pola contra á recompensa polas boas obras. O progresivo crecemento do nariz de madeira polas sucesivas mentiras, ou a súa conversión final en neno de carne e óso pola súa boa conduta resumen este histórico conto, non exento tamén de momentos con tinguiduras dramáticas.

O nariz de Pinocho crece cada vez que di unha mentira, o que nos vén a dicir que as accións teñen consecuencias, e que cando un político mente debería recoñecer o seu erro e tomar medidas para corrixilo. 

Neste conto a Pinocho engánano para ir ao país dos parvos onde os nenos convértense en burros, gardando similitude coas solucións máxicas que nos prometen a problemas complexos, e como Pinocho pronto descubriremos que a falta de responsabilidade sitúanos máis preto da fantasía que da realidade.

No noso caso, no comportamento de quen senta hoxe no Consello de ministros e de quen o preside, existe un certo paralelismo coa historia de Pinocho. Eles cren que o de menos é dicir a verdade, que o único que conta é o relato, aínda que este non teña autenticidade, e equivócanse. A distancia entre o que din e o que fan, neste momento, xa se mide en narices que non pairan de crecer.

Como di o refrán, “unha mentira segue crecendo e crecendo ata que é tan evidente como o nariz da túa cara”. Nos nosos gobernantes, o nariz da súa cara segue crecendo a tal velocidade que pronto se molestasen entre eles, por moi ancha e larga que sexa a mesa do Consello de ministros. Son as consecuencias de promesas rotas e discursos afastados da realidade que farán que terminen enredados nas súas propias invencións, que se creben como a madeira débil, #ante a presión da realidade, o que evidenciará que a palabra que dan só é válida mentres sexa conveniente.

Na historia de Pinocho, estudar, traballar e ser bo coidando ao seu pai enfermo, transfórmano nun neno de verdade. No noso caso, os membros do goberno parecen marionetas de madeira que se moven ao ritmo das súas mentiras, sen caer na conta de que a única forma de converterse en persoas de verdade como logrou Pinocho, é contando a verdade. Cuantos hoxe están a facer da mentira o seu escudo de protección nunca se converterán nun goberno de verdade, e do mesmo xeito que a ese boneco de madeira crecíalle o nariz non podendo ocultala, cada mentira, cada novo engano, cada intento de ocultalo, máis pronto que tarde tamén sairá á luz. Somos moitos os que o esperamos.

miércoles, 2 de octubre de 2024

Inmigración y demografía

La última encuesta del CIS ha revelado un dato que, no por esperado, deja de tener motivos sobrados para una reflexión colectiva. La primera de las preocupaciones que tenemos los españoles ahora es la inmigración.

Las imágenes que ilustran las noticias que diariamente nos hablan de los cientos o miles de personas llegando diariamente a nuestras costas, especialmente a las de Canarias, habrán contribuido a posicionar ese problema como número uno de nuestras preocupaciones. 

No estamos ante un tema que haya aparecido ahora. Si tenemos algo de memoria recordaremos situaciones similares desde hace ya tiempo. Esta llegada masiva y desordenada provoca problemas no menores en muchas poblaciones y genera inquietud en muchos españoles. Problemas como la presión sobre nuestros servicios públicos, economía sumergida, por la dificultad para muchos de acceder a empleos formales con la consecuente distorsión del mercado laboral, aparición de discursos xenófobos y populistas, marginación social…

En este asunto no caigamos ni en criminalizar, ni el buenismo y el consentimiento de permitir costumbres y comportamientos ajenos a nuestra cultura, como el uso del velo como símbolo identitario del apartheid de genero musulmán o permitir el casamiento forzoso de niñas musulmanas menores convertidas en esclavas sexuales. Son solo dos ejemplos.

La otra cara de la moneda viene reflejada en un reciente estudio del Instituto Nacional de Estadística sobre el saldo vegetativo en España desde este año 2024 hasta 2074, un periodo en que en los próximos 50 años la diferencia prevista entre nacimientos y defunciones ofrece un saldo negativo alarmante. Para este año el saldo negativo es de 132.000 personas, pero para dentro de 50 años será de cerca de 300.000 personas.

En otras palabras y cifras, cuando comparamos el número de nacimientos con el número de defunciones en un año la pirámide demográfica de España nos indica un envejecimiento de la población, una reducción de la población joven y un aumento de la de mayor edad. Todo ello lo que implica es un crecimiento poblacional estancado o negativo y unos desafíos económicos y sociales muy preocupantes, como el reto de sostener el sistema de pensiones, la necesidad de incrementar los servicios de salud y cuidados para personas mayores y una reducción de la fuerza laboral. Una transición hacia poblaciones más envejecidas en España, pero también en otros países europeos.

Nuestros gobernantes están entretenidos con los problemas derivados de la inestabilidad de la legislatura y la falta de apoyos, con negociaciones vergonzosas con independentistas para garantizarse unos meses más en el poder y por ello en sus agendas este problema demográfico no figura ni en la última de sus páginas, cuando resulta urgente la necesidad de implementar medidas como la gratuidad en las escuelas infantiles, ya disponible en Galicia, primar económicamente la maternidad, o más medidas en el campo laboral que faciliten la crianza de los hijos, entre otras muchas.

Mientras esas políticas no estén disponibles, sólo con la llegada de una inmigración con permiso de residencia en España por tener contratos de trabajo, podría compensarse este déficit demográfico a corto plazo. 

La inmigración es necesaria y bienvenida, pero ordenada y con modelos de integración y respeto a nuestras culturas y tradiciones. Posiblemente así deje de ser la preocupación principal de los españoles.


Inmigración e demografía

A última enquisa do CIS revelou un dato que, non por esperado, deixa de ter motivos sobrados para unha reflexión colectiva. A primeira das preocupacións que temos os españois agora é a inmigración.

As imaxes que ilustran as noticias que diariamente nos falan dos centos ou miles de persoas chegando diariamente ás nosas costas, especialmente ás de Canarias, contribuirían a posicionar ese problema como número uno das nosas preocupacións. 

Non estamos #ante un tema que aparecese agora. Se temos algo de memoria lembraremos situacións similares desde hai xa tempo. Esta chegada masiva e desordenada provoca problemas non menores en moitas poboacións e xera inquietude en moitos españois. Problemas como a presión sobre os nosos servizos públicos, economía mergullada, pola dificultade para moitos de acceder a empregos formais coa consecuente distorsión do mercado laboral, aparición de discursos xenófobos e populistas, marxinación social…

Neste asunto non caiamos nin en criminalizar, nin o buenismo e o consentimento de permitir costumes e comportamentos alleos á nosa cultura, como o uso do veo como símbolo identitario do apartheid de xero musulmán ou permitir o casamento forzoso de nenas musulmás menores convertidas en escravas sexuais. Son só dous exemplos.

A outra cara da moeda vén reflectida nun recente estudo do Instituto Nacional de Estatística sobre o saldo vexetativo en España desde este ano 2024 ata 2074, un período en que nos próximos 50 anos a diferenza prevista entre nacementos e defuncións ofrece un saldo negativo alarmante. Para este ano o saldo negativo é de 132.000 persoas, pero para dentro de 50 anos será de preto de 300.000 persoas.

Noutras palabras e cifras, cando comparamos o número de nacementos co número de defuncións nun ano a pirámide demográfica de España indícanos un envellecemento da poboación, unha redución da poboación nova e un aumento da de maior idade. Todo iso o que implica é un crecemento poboacional estancado ou negativo e uns desafíos económicos e sociais moi preocupantes, como o reto de soster o sistema de pensións, a necesidade de incrementar os servizos de saúde e coidados para persoas maiores e unha redución da forza laboral. Unha transición cara a poboacións máis envellecidas en España, pero tamén noutros países europeos.

Os nosos gobernantes están entretidos cos problemas derivados da inestabilidade da lexislatura e a falta de apoios, con negociacións vergoñosas con independentistas para garantirse uns meses máis no poder e por iso nas súas axendas este problema demográfico non figura nin na última das súas páxinas, cando resulta urxente a necesidade de implementar medidas como a gratuidade nas escolas infantís, xa dispoñible en Galicia, primar economicamente a maternidade, ou máis medidas no campo laboral que faciliten a crianza dos fillos, entre outras moitas.

Mentres esas políticas non estean dispoñibles, só coa chegada dunha inmigración con permiso de residencia en España por ter contratos de traballo, podería compensarse este déficit demográfico a curto prazo. 

A inmigración é necesaria e benvida, pero ordenada e con modelos de integración e respecto ás nosas culturas e tradicións. Posiblemente así deixe de ser a preocupación principal dos españois.

miércoles, 18 de septiembre de 2024

Cimentar

Parece algo no sólo razonable sino casi un axioma indiscutible, que lo normal es empezar las construcciones por la cimentación, asegurando que la posterior estructura tenga estabilidad y se pueda terminar la obra sin incidencias. De ahí que cuando realizamos alguna crítica sobre cómo se plantean algunas actuaciones podamos utilizar el símil de que están empezando las obras por el tejado.

Esto viene a cuento de algunas de las actuaciones que por enésima vez vuelven a ser noticia en nuestra ciudad, en esta ocasión por el inicio del trabajo de las máquinas, una vez superadas las etapas de los convenios, las discusiones, los presupuestos, los proyectos y un largo etcétera de inconvenientes. Es lo que viene ocurriendo con la construcción de una nueva estación de ferrocarril y una de autobuses, unidas, en lo que ahora ha venido en llamarse estación intermodal.

En esta actuación parece que lo de cimentar en primer lugar no es lo que se pretende hacer. Lo digo porque queremos una nueva estación para los trenes, que son noticia por su ausencia, por su falta de frecuencias y por lo tanto de viajeros. Todavía hay discursos que hablan de que a Lugo y a su nueva estación llegarán los trenes de alta velocidad y sin ningún género de dudas les digo que pasarán décadas para que eso pueda ser verdad.

Comenzamos a demoler un edificio para construir otro más amplio, con más aparcamientos y no sé cuántas virtudes más, pero no hemos resuelto todavía que a Lugo le lleguen y salgan a diario más trenes, corran o no como los de otras capitales, pero que tengamos más frecuencias y por lo tanto más opciones para viajar.

Al mismo tiempo decidimos que el medio de transporte más utilizado por aquellos que no disponen de automóvil o que no pueden conducir para venir a Lugo a realizar alguna gestión desde cualquiera de los pueblos de la provincia, el autobús, deje de tener su punto de llegada y salida al pie de la muralla, en pleno centro de la ciudad, con lo que ello supone de comodidades para los usuarios. Y lo rematamos haciendo que la nueva ubicación sea en la zona de la estación del tren, a una cota de desnivel muy difícil de salvar para personas mayores o con limitaciones, que por otra parte son mayoritarias en el uso de este tipo de transporte. Todo con la pretendida argumentación de facilitar el intercambio entre los pasajeros de los trenes y los buses. ¿Qué trenes?, ¿qué viajeros?

Con motivo del inicio de estas obras he leído que aún no está decidido que se hará con la que dejará de ser la actual estación de autobuses, que se verá en su momento. Esto es a lo que llamo empezar la casa por el tejado y no cimentar adecuadamente el proyecto de ciudad que Lugo quiere y necesita.

Tirar con edificios como estas dos estaciones, o dejarlos caer como el cuartel de San Fernando, no ser capaces de poner en funcionamiento otros que nos han costado muchos millones, como el nuevo auditorio, o no ser capaces de consensuar modelos viables de funcionamiento como el de la Plaza de Abastos o el Mercado, son síntomas de esa falta de una adecuada cimentación de nuestra ciudad, por no hablar de las losetas recién colocadas y mal cimentadas en los nuevos espacios peatonales.

No reniego de las inversiones de futuro, pero apuesto por rehabilitar y potenciar lo que ya tenemos. No sirve de nada construir nuevas dotaciones si detrás no hay quien las haga viables y sostenibles.


Cimentar

Parece algo non só razoable senón case un axioma indiscutible, que o normal é empezar as construcións pola cimentación, asegurando que a posterior estrutura teña estabilidade e póidase terminar a obra sen incidencias. Por iso é polo que cando realizamos algunha crítica sobre como se expoñen algunhas actuacións podamos utilizar o símil de que están a empezar as obras polo tellado.

Isto vén a conto dalgunhas das actuacións que por enésima vez volven ser noticia na nosa cidade, nesta ocasión polo inicio do traballo das máquinas, unha vez superadas as etapas dos convenios, as discusións, os orzamentos, os proxectos e un longo etcétera de inconvenientes. É o que vén ocorrendo coa construción dunha nova estación de ferrocarril e unha de autobuses, unidas, no que agora veu en chamarse estación intermodal.

Nesta actuación parece que o de cimentar en primeiro lugar non é o que se pretende facer. Dígoo porque queremos unha nova estación para os trens, que son noticia pola súa ausencia, pola súa falta de frecuencias e por tanto de viaxeiros. Aínda hai discursos que falan de que a Lugo e á súa nova estación chegarán os trens de alta velocidade e sen ningún xénero de dúbidas dígolles que pasarán décadas para que iso poida ser verdade.

Comezamos a demoler un edificio para construír outro máis amplo, con máis aparcamentos e non se cantas virtudes máis, pero non habemos resolvido aínda que a Lugo chéguenlle e saian a diario máis trens, corran ou non como os doutras capitais, pero que teñamos máis frecuencias e por tanto máis opcións para viaxar.

Ao mesmo tempo decidimos que o medio de transporte máis utilizado por aqueles que non dispoñen de automóbil ou que non poden conducir para vir a Lugo a realizar algunha xestión desde calquera dos pobos da provincia, o autobús, deixe de ter o seu punto de chegada e saída ao pé da muralla, en pleno centro da cidade, co que iso supón de comodidades para os usuarios. E rematámolo facendo que a nova localización sexa na zona da estación do tren, a unha cota de desnivel moi difícil de salvar para persoas maiores ou con limitacións, que por outra banda son maioritarias no uso deste tipo de transporte. Todo coa pretendida argumentación de facilitar o intercambio entre os pasaxeiros dos trens e os buses. Que trens?, que viaxeiros?

Con motivo do inicio destas obras lin que aínda non está decidido que se fará coa que deixará de ser a actual estación de autobuses, que se verá no seu momento. Isto é ao que chamo empezar a casa polo tellado e non cimentar adecuadamente o proxecto de cidade que Lugo quere e necesita.

Tirar con edificios como estas dúas estacións, ou deixalos caer como o cuartel de San Fernando, non ser capaces de poñer en funcionamento outros que nos custaron moitos millóns, como o novo auditorio, ou non ser capaces de acordar modelos viables de funcionamento como o da Praza de Abastos ou o Mercado, son síntomas desa falta dunha adecuada cimentación da nosa cidade, por non falar das lousas recentemente colocadas e mal cimentadas nos novos espazos peonís.

Non renego dos investimentos de futuro, pero aposto por rehabilitar e potenciar o que xa temos. Non serve de nada construír novas dotacións se detrás non hai quen as faga viables e sostibles.

miércoles, 4 de septiembre de 2024

Maniobras de distracción

Que las vacaciones son para desconectar es algo aceptado y reconocido universalmente, pero que esa desconexión implique indiferencia ante acontecimientos y noticias de gran alcance y transcendencia ya no parece tan asumible.

Que algunos gobernantes utilicen los periodos estivales y con los ciudadanos mayoritariamente en tiempo de vacaciones para aprobar medidas impopulares o para transgredir las mínimas formas y maneras democráticas, empieza a ser ya una costumbre.

Pero todo ello debería tener un límite y este verano han ocurrido muchas cosas que algunos han querido que pasaran inadvertidas o que los ciudadanos les prestasen menos atención de la debida por estar centrados en pasar unos días tranquilos y alejados de las obligaciones del resto del año.

Sólo citaré, a modo de ejemplos, algunas de las noticias que en estos dos meses estivales han tenido repercusión en los medios nacionales e internacionales. No son todas, pero si las que me han parecido más relevantes.

Sin mencionar las relacionadas con sucesos y tragedias, que generalmente son las más morbosas, quién no ha escuchado, visto o leído noticias relacionadas con diferentes conflictos bélicos en Ucrania, Oriente Medio, las tensiones entre Estados Unidos y China, o el escandaloso pucherazo que pocos niegan, aunque algunos callen, acontecido en las últimas elecciones venezolanas.

Pero sin duda a nadie debería haberle pasado desapercibido algunas de las cuestiones que más directamente afectaron a España y por lo tanto a todos nosotros. 

Me refiero a las negociaciones y al precio que pagaremos por tener un presidente socialista en Cataluña y, por ende, mantener al presidente Sánchez en la Moncloa. O qué decir del bochorno internacional a provocado por el espectáculo de Puigdemont apareciendo en lugar y hora bien anunciados previamente y burlando a los cientos de policías que deberían detenerlo. Y por último, por no agotar el espacio disponible, qué decir de la continua llegada masiva de migrantes a nuestras costas, especialmente de Canarias y Ceuta, ocasionando una crisis migratoria de gran impacto social pero que parece que no merece respuesta ni por nuestro gobierno ni, por extensión, por parte de las autoridades europeas que también parecen haberse tomado en serio lo de desconectar de todo este verano.

Si a ello añadimos que también durante el verano el deporte, llámese Juegos Olímpicos o liga de fútbol, han servido una vez más de atenuante o bálsamo para que los ciudadanos permaneciesen realmente distraídos a las noticias que antes comentaba, las maniobras de distracción han causado el efecto deseado para algunos.

Me caben muchas dudas sobre el por qué de esta actitud. Me preocupa que nos vayamos acostumbrando a los escándalos, corruptelas, inoperancia o lo que es peor, a la toma de acuerdos y decisiones que en otros tiempos y con gobiernos de otro color hubiesen supuesto, aún en verano,  movilizaciones y protestas diarias en las calles. No es posible una sociedad anestesiada, indiferente ante decisiones cuyas consecuencias, aunque algunos no lo crean, nos afectan a todos, y mucho. Vale que necesitemos distraernos, y el verano es buen momento, pero ahora que ya va tocando a su fin y ya estamos en tiempo de la vuelta al cole, a ver si no caemos en las maniobras de distracción.

Manobras de distracción

Que as vacacións son para desconectar é algo aceptado e recoñecido universalmente, pero que esa desconexión implique indiferenza #ante acontecementos e noticias de gran alcance e transcendencia xa non parece tan asumible.

Que algúns gobernantes utilicen os períodos estivais e cos cidadáns maioritariamente en tempo de vacacións para aprobar medidas impopulares ou para transgredir as mínimas formas e maneiras democráticas, empeza a ser xa un costume.

Pero todo iso debería ter un límite e este verán ocorreron moitas cousas que algúns quixeron que pasasen inadvertidas ou que os cidadáns lles prestasen menos atención da debida por estar centrados en pasar uns días tranquilos e afastados das obrigacións do resto do ano.

Só citarei, a modo de exemplos, algunhas das noticias que nestes dous meses estivais tiveron repercusión nos medios nacionais e internacionais. Non son todas, pero se as que me pareceron máis relevantes.

Sen mencionar as relacionadas con sucesos e traxedias, que xeralmente son as máis morbosas, quen non escoitou, visto ou lido noticias relacionadas con diferentes conflitos bélicos en Ucraína, Oriente Medio, as tensións entre Estados Unidos e China, ou a escandalosa fraude electoral que poucos negan, aínda que algúns calen, acontecido nas últimas eleccións venezolanas.

Pero sen dúbida a ninguén debería pasarlle desapercibido algunhas das cuestións que máis directamente afectaron a España e por tanto a todos nós. 

Refírome ás negociacións e ao prezo que pagaremos por ter un presidente socialista en Cataluña e, polo tanto, manter ao presidente Sánchez na Moncloa. Ou que dicir do bochorno internacional a provocado polo espectáculo de Puigdemont aparecendo en lugar e hora ben anunciados previamente e burlando aos centos de policías que deberían detelo. E por último, por non esgotar o espazo dispoñible, que dicir da continua chegada masiva de migrantes ás nosas costas, especialmente de Canarias e Ceuta, ocasionando unha crise migratoria de gran impacto social pero que parece que non merece resposta nin polo noso goberno nin, por extensión, por parte das autoridades europeas que tamén parecen tomarse en serio o de desconectar de todo este verán.

Se a iso engadimos que tamén durante o verán o deporte, chámese Xogos Olímpicos ou liga de fútbol, serviron unha vez máis de atenuante ou bálsamo para que os cidadáns permanecesen realmente distraídos ás noticias que antes comentaba, as manobras de distracción causaron o efecto desexado para algúns.

Cábenme moitas dúbidas sobre o por que desta actitude. Preocúpame que nos vaiamos afacendo aos escándalos, corruptelas, inoperancia ou o que é peor, á toma de acordos e decisións que noutros tempos e con gobernos doutra cor supuxesen, aínda no verán,  mobilizacións e protestas diarias nas rúas. Non é posible unha sociedade anestesiada, indiferente #ante decisións cuxas consecuencias, aínda que algúns non o crean, aféctannos a todos, e moito. Vale que necesitemos distraernos, e o verán é bo momento, pero agora que xa vai tocando ao seu fin e xa estamos en tempo da volta ao cole, a ver se non caemos nas manobras de distracción.

miércoles, 26 de junio de 2024

10 años versus 10 minutos

Este titular pretende poner el foco en la estabilidad del reinado de Felipe VI frente a la inestabilidad de la presidencia del gobierno de Pedro Sánchez.

En un ambiente cada día políticamente más crispado, los valores de estabilidad, dedicación inquebrantable a los deberes constitucionales y los esfuerzos por mantener la unidad en nuestra sociedad cobran protagonismo, más que por inusuales, por el contraste frente a quien debería, como presidente de un gobierno, trabajar en mejorar la vida de sus ciudadanos y respetar las normas constitucionales que rigen nuestra convivencia.

El reinado de Felipe VI durante estos últimos 10 años no ha sido fácil, pero ha quedado marcado por el cumplimiento de sus principales compromisos con los españoles.

Ha sido un defensor constante de la Constitución y de la unidad de España, especialmente durante la crisis independentista de Cataluña.

Ha impulsado reformas modernizadoras de la institución monárquica haciéndola más transparente y accesible. 

Ha desempeñado un papel activo en la promoción de las relaciones internacionales de España, fortaleciendo lazos diplomáticos, económicos y culturales con otras naciones.

Ha mostrado un fuerte apoyo a los militares y cuerpos y fuerzas de seguridad.

Su reinado está siendo una búsqueda constante del servicio al interés general de los españoles.

Por el contrario, y como contraste, tenemos algunos ejemplos de los notables cambios de rumbo y opinión de la presidencia de Pedro Sánchez, cambios cada 10 minutos.

Pasó de afirmar que no dormiría tranquilo con Podemos en su gobierno a formar una coalición con ellos. Prometió no subir los impuestos a la clase media y trabajadora y ha aprobado medidas que implican aumentos impositivos o nuevos impuestos. Durante la crisis del COVID-19 comenzó subestimando la gravedad del virus para en 10 minutos pasar a aplicar medidas de confinamiento y restricciones que posteriormente fueron declaradas no ajustadas a derecho. Aseguró que no negociaría con partidos independentistas, pero todos hemos conocido y sufrido sus posteriores acuerdos. Nos aseguró que nunca aprobaría una Ley de Amnistía y ya está aprobada y en vigor. Nos hablaba de unidad y concordia y se ha esforzado al máximo en levantar muros frente a una parte de la sociedad, al tiempo que nos muestra su obsesión por remover la historia pasada promoviendo leyes como la de Memoria Democrática. En política y relaciones internacionales los cambios de rumbos han sido constantes en función de sus circunstancias e intereses partidistas y de gobierno, como los practicados en Venezuela, Marruecos, Libia, Israel o Argentina.

Los contrastes entre la forma de reinar y la de gobernar son más que evidentes. Mientras nuestro Rey ha mostrado constantes esfuerzos por superar los desafíos que le ha tocado vivir al tiempo que respetaba la tradición y la estabilidad de la institución que representa, el presidente Sánchez ha mostrado un comportamiento inconsistente en el cumplimiento de sus promesas, está deteriorando la imagen de la institución y de la propia Nación, deteriorando su propia imagen pública y perdiendo la confianza de muchos españoles.

Quedamos pendientes de lo que suceda en los próximos 10 minutos.


10 anos versus 10 minutos

Este titular pretende poñer o foco na estabilidade do reinado de Felipe VIN fronte á inestabilidade da presidencia do goberno de Pedro Sánchez.

Nun ambiente cada día politicamente máis crispado, os valores de estabilidade, dedicación inquebrantable aos deberes constitucionais e os esforzos por manter a unidade na nosa sociedade cobran protagonismo, máis que por inusuais, polo contraste fronte a quen debería, como presidente dun goberno, traballar en mellorar a vida dos seus cidadáns e respectar as normas constitucionais que rexen a nosa convivencia.

O reinado de Felipe VI durante estes últimos 10 anos non foi fácil, pero quedou marcado polo cumprimento dos seus principais compromisos cos españois.

Foi un defensor constante da Constitución e da unidade de España, especialmente durante a crise independentista de Cataluña.

Impulsou reformas modernizadoras da institución monárquica facéndoa máis transparente e accesible. 

Desempeñou un papel activo na promoción das relacións internacionais de España, fortalecendo lazos diplomáticos, económicos e culturais con outras nacións.

Mostrou un forte apoio aos militares e corpos e forzas de seguridade.

O seu reinado está a ser unha procura constante do servizo ao interese xeral dos españois.

Pola contra, e como contraste, temos algúns exemplos dos notables cambios de rumbo e opinión da presidencia de Pedro Sánchez, cambios cada 10 minutos.

Pasou de afirmar que non durmiría tranquilo con Podemos no seu goberno para formar unha coalición con eles. Prometeu non subir os impostos á clase media e traballadora e aprobou medidas que implican aumentos impositivos ou novos impostos. Durante a crise do COVID-19 comezou subestimando a gravidade do virus para en 10 minutos pasar a aplicar medidas de confinamento e restricións que posteriormente foron declaradas non axustadas a dereito. Asegurou que non negociaría con partidos independentistas, pero todos coñecemos e sufrimos os seus posteriores acordos. Asegurounos que nunca aprobaría unha Lei de Amnistía e xa está aprobada e en vigor. Falábanos de unidade e concordia e esforzouse ao máximo en levantar muros fronte a unha parte da sociedade, á vez que nos mostra a súa obsesión por remover a historia pasada promovendo leis como a de Memoria Democrática. En política e relacións internacionais os cambios de rumbos foron constantes en función das súas circunstancias e intereses partidistas e de goberno, como os practicados en Venezuela, Marrocos, Libia, Israel ou Arxentina.

Os contrastes entre a forma de reinar e a de gobernar son máis que evidentes. Mentres o noso Rey mostrou constantes esforzos por superar os desafíos que lle tocou vivir á vez que respectaba a tradición e a estabilidade da institución que representa, o presidente Sánchez mostrou un comportamento inconsistente no cumprimento das súas promesas, está a deteriorar a imaxe da institución e da propia Nación, deteriorando a súa propia imaxe pública e perdendo a confianza de moitos españois.

Quedamos pendentes do que suceda nos próximos 10 minutos.

miércoles, 12 de junio de 2024

Leer los números

Habiendo pasado pocos días de una noche electoral, y mientras en los medios no dejan de aparecer cifras, sean de sondeos o de recuentos oficiales y la interpretación que cada uno hace de los mismos, pareciera que este artículo hablará de eso, pero no. Los números, las cifras en las que en esta ocasión pongo mi enfoque tienen otras connotaciones. Empecemos.

Después de que algunas Comunidades Autónomas tomaran la iniciativa prohibiendo el uso de móviles en las aulas, el Gobierno nos anuncia un proyecto de ley para garantizar la protección digital de los menores con la obligación del control parental en los móviles. Llevamos mucho tiempo viendo cómo la utilización de dispositivos móviles con conexión a Internet tiene repercusiones en las costumbres y hábitos sociales, pero pocas veces hemos visto cifras tan preocupantes relacionadas con el acceso cada vez más temprano y las consecuentes adicciones generadas por grupos de edad.

Según un estudio sobre salud mental en las aulas, el 86% de las enfermeras escolares tienen algún alumno diagnosticado con problema de salud mental. Nos dice que siguen aumentando los problemas de salud mental en los centros educativos, evidenciándose en síntomas como el déficit de atención TDAH (81%), la ansiedad (66,4%), los intentos de suicidios y las autolesiones (65,9%).

En Noruega han realizado estudios que han evidenciado una relación directa entre el uso del móvil en las aulas y las consultas a los especialistas en salud mental. Así, una de las conclusiones del estudio apunta que la prohibición de los móviles lleva aparejada una disminución importante en el número de consultas relacionadas con síntomas y enfermedades psicológicas.

En España el Centro de adicciones Comportamentales del Hospital Gregorio Marañón también lleva trabajando en las consecuencias de las adicciones más frecuentes en adultos (las apuestas, las compras y el sexo) y en menores (los videojuegos y las redes sociales). Los números también aquí nos dicen mucho. El 63% de los menores tratados en este centro, con una edad media de 14 años, tienen problemas de adicción a los videojuegos. Me llamó la atención una de las conclusiones, al decirnos que están tan enganchados que dejan de dormir las horas recomendadas para su edad e incluso se olvidan de comer para seguir jugando. Un 65% de adultos y un 47% de niños fueron tratados por cuadros de adicción.

Los expertos avisan, es imprescindible la colaboración de los padres. Lo he dicho en más ocasiones, la dinámica familiar donde trabajan los dos padres, se llega tarde y cansado a casa, lo cómodo es echar mano de lo que algún doctor ha denominado acertadamente la niñera digital, es decir, permitir como método de entretenimiento y de que los niños estén tranquilos la utilización de pantallas digitales sin control, convirtiéndose en la forma principal y favorita de sus ratos de ocio. La recomendación de los expertos nos advierte de que las ofertas de tiempo libre deben alejarse de las fuentes del problema, los dispositivos móviles, y añaden que nadie debería tener acceso a estos dispositivos antes de los 12 años sin una supervisión directa.

Como verán detrás de estos números hay serios problemas a los que se debe y puede poner freno si queremos mejorar la salud mental en nuestra sociedad.  

Ler os números

Pasando poucos días dunha noite electoral, e mentres nos medios non deixan de aparecer cifras, sexan de sondaxes ou de recontos oficiais e a interpretación que cada un fai dos mesmos, parecese que este artigo falará diso, pero non. Os números, as cifras nas que nesta ocasión poño o meu enfoque teñen outras connotacións. Empecemos.

Despois de que algunhas Comunidades Autónomas tomasen a iniciativa prohibindo o uso de móbiles nas aulas, o Goberno anúncianos un proxecto de lei para garantir a protección dixital dos menores coa obrigación do control parental nos móbiles. Levamos moito tempo vendo como a utilización de dispositivos móbiles con conexión a Internet ten repercusións nos costumes e hábitos sociais, pero poucas veces vimos cifras tan preocupantes relacionadas co acceso cada vez máis temperán e as consecuentes adiccións xeradas por grupos de idade.

Segundo un estudo sobre saúde mental nas aulas, o 86% das enfermeiras escolares teñen algún alumno diagnosticado con problema de saúde mental. Dinos que seguen aumentando os problemas de saúde mental nos centros educativos, evidenciándose en síntomas como o déficit de atención TDAH (81%), a ansiedade (66,4%), os intentos de suicidios e as autolesiones (65,9%).

En Noruega realizaron estudos que evidenciaron unha relación directa entre o uso do móbil nas aulas e as consultas aos especialistas en saúde mental. Así, unha das conclusións do estudo apunta que a prohibición dos móbiles leva aparellada unha diminución importante no número de consultas relacionadas con síntomas e enfermidades psicolóxicas.

En España o Centro de adiccións Comportamentales do Hospital Gregorio Marañón tamén leva traballando nas consecuencias das adiccións máis frecuentes en adultos (as apostas, as compras e o sexo) e en menores (os videoxogos e as redes sociais). Os números tamén aquí dinnos moito. O 63% dos menores tratados neste centro, cunha idade media de 14 anos, teñen problemas de adicción aos videoxogos. Chamoume a atención unha das conclusións, ao dicirnos que están tan enganchados que deixan de durmir as horas recomendadas para a súa idade e mesmo se esquecen para comer para seguir xogando. Un 65% de adultos e un 47% de nenos foron tratados por cadros de adicción.

Os expertos avisan, é imprescindible a colaboración dos pais. Díxeno en máis ocasións, a dinámica familiar onde traballan os dous pais, chégase tarde e canso a casa, o cómodo é botar man do que algún doutor denominou acertadamente a aia dixital, é dicir, permitir como método de entretemento e de que os nenos estean tranquilos a utilización de pantallas dixitais sen control, converténdose na forma principal e favorita dos seus intres de lecer. A recomendación dos expertos advírtenos de que as ofertas de tempo libre deben afastarse das fontes do problema, os dispositivos móbiles, e engaden que ninguén debería ter acceso a estes dispositivos antes dos 12 anos sen unha supervisión directa.

Como verán detrás destes números hai serios problemas aos que se debe e pode poñer freo se queremos mellorar a saúde mental na nosa sociedade.  


miércoles, 29 de mayo de 2024

Tan lejos, tan cerca

Es muy frecuente que nos fijemos con más atención en las instituciones y organismos que tenemos más cercanos y que cuando estos se sitúan lejanos pensemos que sus decisiones no van con nosotros. Es por ello por lo que muy a menudo percibimos las instituciones europeas como entidades lejanas, con sede en Bruselas o Estrasburgo, alejadas de nuestra realidad del día a día. Sin embargo, las decisiones tomadas en el Parlamento Europeo tienen un impacto directo y significativo en numerosos aspectos de nuestra vida cotidiana, como las que afectan a los sectores económicos vitales para nuestra tierra, como la pesca y la agricultura.

Galicia, con su rica tradición agrícola y pesquera, depende en gran medida de las políticas decididas a nivel europeo. La Política Agrícola Común (PAC) y la Política Pesquera Común (PPC) son ejemplos de cómo las directivas europeas influyen en nuestra tierra. Estas políticas determinan no sólo cómo se distribuyen los fondos para el desarrollo rural y la pesca, sino también las normas sobre producción y comercialización de productos. Los acuerdos alcanzados en el Parlamento Europeo afectan directamente a nuestros agricultores y pescadores, influyendo de manera muy sensible en su rentabilidad y en la sostenibilidad de sus actividades.

Así en la pesca, una de nuestras actividades económicas más emblemáticas, las cuotas pesqueras o las normativas sobre la regulación de los caladeros en los que faenamos son decididas en gran medida a nivel europeo. 

Más allá de estos y otros sectores específicos, es importante recordar que gran parte de nuestra legislación nacional proviene de directivas comunitarias de obligada transposición a nuestra legislación. Desde la protección al consumidor hasta las normas medioambientales, pasando por cuestiones relacionadas con los derechos sociales, la política de defensa, de economía… muchas de las reglas que cumplimos en Galicia son, en realidad, decididas a nivel europeo. Esto subraya la importancia de estar presentes y activos en la toma de decisiones de la UE.

Quiero reconocer y valorar, porque lo he seguido muy de cerca, el trabajo realizado por los diputados del Partido Popular Europeo (PPE), quienes han demostrado una constante sensibilidad y capacidad de trabajo en los asuntos que más afectan a Galicia. Su labor en la defensa de nuestros intereses, desde la negociación de fondos europeos hasta la protección de nuestros sectores productivos, ha sido fundamental. Elegir a representantes comprometidos y eficientes es esencial para asegurar que nuestras necesidades y aspiraciones se vean adecuadamente representadas en el Parlamento Europeo.

Por ello, aunque muchos puedan pensar que el día 9 de junio no se pierde nada si no van a votar, si lo piensan porque se eligen a personas que van a desempeñar su labor a cientos de kilómetros de nuestras ciudades y pueblos, les digo que a pesar de ello, y de la desafección cada día mayor por la política y los políticos, aunque lo vean como algo muy lejano, en realidad lo que elijan afectará a cuestiones muy cercanas a nuestra vida diaria.

Tan lonxe, tan preto

É moi frecuente que nos fixemos con máis atención nas institucións e organismos que temos máis próximos e que cando estes sitúanse afastados pensemos que as súas decisións non van connosco. É por iso polo que moi a miúdo percibimos as institucións europeas como entidades afastadas, con sede en Bruxelas ou Estrasburgo, afastadas da nosa realidade do día a día. Con todo, as decisións tomadas no Parlamento Europeo teñen un impacto directo e significativo en numerosos aspectos da nosa vida cotiá, como as que afectan os sectores económicos vitais para a nosa terra, como a pesca e a agricultura.

Galicia, coa súa rica tradición agrícola e pesqueira, depende en gran medida das políticas decididas a nivel europeo. A Política Agrícola Común (PAC) e a Política Pesqueira Común (PPC) son exemplos de como as directivas europeas inflúen na nosa terra. Estas políticas determinan non só como se distribúen os fondos para o desenvolvemento rural e a pesca, senón tamén as normas sobre produción e comercialización de produtos. Os acordos alcanzados no Parlamento Europeo afectan directamente aos nosos agricultores e pescadores, influíndo de maneira moi sensible na súa rendibilidade e na sustentabilidade das súas actividades.

Así na pesca, unha das nosas actividades económicas máis emblemáticas, as cotas pesqueiras ou as normativas sobre a regulación dos caladoiros nos que faenamos son decididas en gran medida a nivel europeo. 

Máis aló destes e outros sectores específicos, é importante lembrar que gran parte da nosa lexislación nacional provén de directivas comunitarias de obrigada transposición á nosa lexislación. Desde a protección ao consumidor ata as normas ambientais, pasando por cuestións relacionadas cos dereitos sociais, a política de defensa, de economía… moitas das regras que cumprimos en Galicia son, en realidade, decididas a nivel europeo. Isto subliña a importancia de estar presentes e activos na toma de decisións da UE.

Quero recoñecer e valorar, porque o seguín moi de preto, o traballo realizado polos deputados do Partido Popular Europeo (PPE), quen demostrou unha constante sensibilidade e capacidade de traballo nos asuntos que máis afectan a Galicia. O seu labor na defensa dos nosos intereses, desde a negociación de fondos europeos ata a protección dos nosos sectores produtivos, foi fundamental. Elixir a representantes comprometidos e eficientes é esencial para asegurar que as nosas necesidades e aspiracións véxanse adecuadamente representadas no Parlamento Europeo.

Por iso, aínda que moitos poidan pensar que o día 9 de xuño non se perde nada se non van votar, se o pensan porque se elixen a persoas que van desempeñar o seu labor por centos de quilómetros das nosas cidades e pobos, dígolles que a pesar diso, e da desafección cada día maior pola política e os políticos, aínda que o vexan como algo moi afastado, en realidade o que elixan afectará a cuestións moi próximas á nosa vida diaria.


miércoles, 15 de mayo de 2024

Gratitud

Han transcurrido unas horas desde que he vivido uno de los momentos más emotivos de mis últimos tiempos y en mi cabeza sólo ronda una palabra: gratitud, cuya definición en el diccionario nos dice que se trata de un sentimiento que obliga a una persona a estimar el beneficio o favor que otra le ha hecho, y a corresponderle de alguna manera.

Efectivamente es un sentimiento que me obliga a corresponder a todos cuantos me han hecho llegar mucho cariño y afecto en estos años y concretamente en el homenaje que el pasado sábado me organizaron. 

No es muy habitual que una persona dedicada durante muchos años al servicio público, que es como concibo la actividad política, sea destinatario de un homenaje por abandonarla y jubilarse. Yo he sido una excepción, y me considero un privilegiado por haberlo recibido.

Han sido muchas las palabras amables y cariñosas dedicadas a mi persona. Posiblemente algunas lo hayan sido por cortesía y por enmarcarse en un acto no apto para reproches. Pero también han sido muchos los abrazos y las miradas sinceras corroborando un genuino afecto. Escuchar a otros decir de ti que te consideran buena persona puede que sea a lo que más importancia le haya dado.

Tampoco me han pasado inadvertidas palabras como amigo, gran amigo, maestro, bellísima persona, afable, educado, abierto a las corrientes de su tiempo, metódico, ordenado, trabajador, abuelo convencido. Palabras que me llenan de emoción, como lo puede hacer escuchar que tus hijas se sienten orgullosísimas de tus valores y de tu ética profesional, que eres su ejemplo de vida, que tu mujer te diga que se siente muy orgullosa de ti, o escuchar a tus nietas diciéndote que eres el mejor abuelo del mundo. 

Hablaron de haber dejado como legado “una forma de ser alcalde, cercano y no conflictivo”, un “excelente recuerdo”, y es abrumador escuchar al presidente de todos los gallegos pidiéndote que no te vayas del todo, que te siguen necesitando.

En mi intervención, además de los sinceros agradecimientos, quise trasladar un ruego a las personas que permanecen activos en política y cuantos en diferentes ámbitos de la sociedad trabajan por mejorar la vida de todos. Una petición para que busquen el acuerdo, el diálogo, el consenso, en el convencimiento de que, aunque no siempre se consiga, sí se sabrá valorar.

Mis palabras finales recogían una frase del escritor y filósofo David Thoreau que dice así: “la bondad es la única inversión que nunca falla”, y si realmente durante mi vida traté de hacer el bien, invertí en bondad, y a la vista de las palabras y el afecto recibido, esa inversión no ha fallado. Por ello después de este acto, además de ser casi imposible contener la emoción, mi sentimiento en mayúsculas es el de GRATITUD, de mucha gratitud. 

Por ello y aunque solo sea una muestra, este articulo hoy pretende deciros a todos: gracias por todo.


Gratitude

Transcorreron unhas horas desde que vivín un dos momentos máis emotivos dos meus últimos tempos e na miña cabeza só rolda unha palabra: gratitude, cuxa definición no dicionario dinos que se trata dun sentimento que obriga a unha persoa para estimar o beneficio ou favor que outra lle fixo, e a corresponderlle dalgunha maneira.

Efectivamente é un sentimento que me obriga a corresponder a todos cuantos fixéronme chegar moito agarimo e afecto nestes anos e concretamente na homenaxe que o pasado sábado me organizaron. 

Non é moi habitual que unha persoa dedicada durante moitos anos ao servizo público, que é como concibo a actividade política, sexa destinatario dunha homenaxe por abandonala e xubilarse. Eu fun unha excepción, e considérome un privilexiado por recibilo.

Foron moitas as palabras amables e cariñosas dedicadas á miña persoa. Posiblemente algunhas o foran por cortesía e por enmarcarse nun acto non apto para reproches. Pero tamén foron moitos os abrazos e as miradas sinceras corroborando un xenuíno afecto. Escoitar a outros dicir de ti que che consideran boa persoa poida que sexa ao que máis importancia deulle.

Tampouco me pasaron inadvertidas palabras como amigo, gran amigo, mestre, belísima persoa, afable, educado, aberto ás correntes do seu tempo, metódico, ordenado, traballador, avó convencido. Palabras que me enchen de emoción, como o pode facer escoitar que as túas fillas senten orgullosísimas dos teus valores e da túa ética profesional, que es o seu exemplo de vida, que a túa muller dígache que sente moi orgullosa de ti, ou escoitar ás túas netas dicíndoche que es o mellor avó do mundo. 

Falaron de deixar como legado “unha forma de ser alcalde, próximo e non conflitivo”, un “excelente recordo”, e é abafador escoitar ao presidente de todos os galegos pedíndoche que non che vaias do todo, que che seguen necesitando.

Na miña intervención, ademais dos sinceros agradecementos, quixen trasladar un rogo ás persoas que permanecen activos en política e cuantos en diferentes ámbitos da sociedade traballan por mellorar a vida de todos. Unha petición para que busquen o acordo, o diálogo, o consenso, no convencemento de que, aínda que non sempre se consiga, si se saberá valorar.

As miñas palabras finais recollían unha frase do escritor e filósofo David Thoreau que di así: “a bondade é o único investimento que nunca falla”, e se realmente durante a miña vida tratei de facer o ben, investín en bondade, e á vista das palabras e o afecto recibido, ese investimento non fallou. Por iso despois deste acto, ademais de ser case imposible conter a emoción, o meu sentimento en maiúsculas é o de GRATITUDE, de moita gratitude. 

Por iso e aínda que só sexa unha mostra, leste articulo hoxe pretende dicirvos a todos: grazas por todo.

miércoles, 1 de mayo de 2024

La otra carta

Desde hace una semana que no se habla más que de la famosa carta que el presidente Sánchez por medio de las redes sociales ha dirigido a los ciudadanos en general. Se ha escrito y hablado mucho del contenido y de la oportunidad de ésta, también de las posibles estrategias políticas estrechamente relacionadas con la misiva. No tengo intención de polemizar ni de añadir más argumentos a favor o en contra de ella, los españoles ya nos hemos hecho una idea de todo ello y de lo que perseguía.

Hoy pongo el foco en otra carta, escrita hace dos años y objeto de mi artículo en este diario a finales de abril de 2022.

Con aquella otra carta dirigida al presidente Sánchez se adjuntaba un documento que contenía un amplio número de propuestas que tenían la finalidad de ayudar al Gobierno, repito de ayudar, en la difícil tarea de mejorar la vida de muchos españoles, especialmente en asuntos relacionados con la escalada de los precios de los alimentos, la electricidad, los combustibles...

Aquella carta dirigida a Pedro Sánchez, y en el documento que recogía las propuestas para ayudarle a acertar en políticas útiles y necesarias, se aclaraba que no solo partían de la iniciativa del principal Partido de la oposición, sino que “en su concepción y desarrollo han participado decenas de personas de la sociedad civil que, siendo conocedoras de esta iniciativa, han formulado sus aportaciones”.

Aquella carta nunca tuvo respuesta, o mejor dicho, la respuesta vino del desprecio a la misma y de la aplicación de medidas en dirección contraria a la que se le ofrecía, y lo que a mí personalmente me ha parecido más preocupante, la polarización de la política, la construcción de muros al entendimiento con quienes obtuvieron más representación parlamentaria y por tanto más respaldo ciudadano.

En aquella carta de hace ahora dos años, quien la firmaba, el líder de la oposición Sr. Feijoo, también le decía a nuestro presidente: “mi forma de entender la política es de entendimiento y, en mi opinión, ningún otro asunto es más urgente en este momento que trabajar juntos para fortalecer el presente y el futuro económico de los españoles.”

También le decía que lo deseable para muchos españoles sería que Ejecutivo y la alternativa de Gobierno trabajen juntos en los temas de estado, siendo anómalo no hacerlo y por ello le añadía “mi voluntad es cambiar esa política y sustituirla por otra que lo considere normal y habitual.”

Todos hemos vivido los sucesos acontecidos en estos dos últimos años y, dejando al margen ideologías y posicionamientos partidistas, podríamos coincidir en que los resultados de las políticas denominadas “progresistas” lo que han conseguido es que la sociedad se encuentre hoy más dividida, enfrentada y polarizada que hace ese breve periodo de tiempo.

De las distintas reacciones a los acontecimientos derivados de la decisión del presidente Sánchez, me ha parecido injustificable culpar al líder de la oposición de traspasar líneas rojas, embarrar el campo de juego y otras lindezas que no voy a reproducir.

Si las palabras de Sánchez este lunes al anunciar que sigue como presidente fuesen sinceras, y su deseo de mejorar la convivencia entre los españoles su prioridad, haciendo de su continuidad “un punto y aparte”, podría empezar por aceptar la invitación que desde hace dos años le brindó el líder de la oposición. Sinceramente no lo espero, y después de escucharlo, me temo lo peor.


A outra carta

Desde hai unha semana que non se fala máis que da famosa carta que o presidente Sánchez por medio das redes sociais ha dirixido aos cidadáns en xeral. Escribiuse e falado moito do contido e da oportunidade desta, tamén das posibles estratexias políticas estreitamente relacionadas coa misiva. Non teño intención de polemizar nin de engadir máis argumentos a favor ou en contra dela, os españois xa nos fixemos unha idea de todo iso e do que perseguía.

Hoxe poño o foco noutra carta, escrita hai dous anos e obxecto do meu artigo neste diario a finais de abril de 2022.

Con aquela outra carta dirixida ao presidente Sánchez anexábase un documento que contiña un amplo número de propostas que tiñan a finalidade de axudar ao Goberno, repito de axudar, na difícil tarefa de mellorar a vida de moitos españois, especialmente en asuntos relacionados coa escalada dos prezos dos alimentos, a electricidade, os combustibles...

Aquela carta dirixida a Pedro Sánchez, e no documento que recollía as propostas para axudarlle a acertar en políticas útiles e necesarias, aclarábase que non só partían da iniciativa do principal Partido da oposición, senón que “na súa concepción e desenvolvemento participaron decenas de persoas da sociedade civil que, sendo coñecedoras desta iniciativa, formularon as súas achegas”.

Aquela carta nunca tivo resposta, ou mellor devandito, a resposta veu do desprezo á mesma e da aplicación de medidas en dirección contraria á que se lle ofrecía, e o que a min persoalmente pareceume máis preocupante, a polarización da política, a construción de muros ao entendemento con quen obtivo máis representación parlamentaria e por tanto máis respaldo cidadán.

Naquela carta de hai agora dous anos, quen a asinaba, o líder da oposición Sr. Feijoo, tamén lle dicía ao noso presidente: “a miña forma de entender a política é de entendemento e, na miña opinión, ningún outro asunto é máis urxente neste momento que traballar xuntos para fortalecer o presente e o futuro económico dos españois.”

Tamén lle dicía que o desexable para moitos españois sería que Executivo e a alternativa de Goberno traballen xuntos nos temas de estado, sendo anómalo non facelo e por iso engadíalle “a miña vontade é cambiar esa política e substituíla por outra que o considere normal e habitual.”

Todos vivimos os sucesos acontecidos nestes dous últimos anos e, deixando á marxe ideoloxías e posicionamentos partidistas, poderiamos coincidir en que os resultados das políticas denominadas “progresistas” o que conseguiron é que a sociedade se atope hoxe máis dividida, enfrontada e polarizada que fai ese breve período de tempo.

Das distintas reaccións aos acontecementos derivados da decisión do presidente Sánchez, pareceume inxustificable culpar ao líder da oposición de traspasar liñas vermellas, embarrar o campo de xogo e outras lindezas que non vou reproducir.

Se as palabras de Sánchez este luns ao anunciar que segue como presidente fosen sinceras, e o seu desexo de mellorar a convivencia entre os españois a súa prioridade, facendo da súa continuidade “un punto e aparte”, podería empezar por aceptar a invitación que desde hai dous anos brindoulle o líder da oposición. Sinceramente non o espero, e despois de escoitalo, témome o peor.

miércoles, 17 de abril de 2024

Patrimonio natural

Cuando puedo realizo escapadas al Reino Unido por motivos familiares, y es un país al que cada día admiro más por su amor para conservar sus lugares de interés histórico o de belleza natural. 

Con esa finalidad crearon en 1895 la fundación conocida como “National Trust” con la intención de cuidar, conservar y poner en valor monumentos y lugares de interés colectivo, entre ellos más de 300 monumentos y más de 200 jardines y bosques.

Una gran parte de su éxito es la participación masiva de voluntarios especializados en diversas materias, que dedican una parte de su tiempo a alguno de estos bienes Estamos hablando de nada menos que unas 60.000 personas de diferentes edades, colaborando desinteresadamente con la fundación.

Ahora les diré por qué he traído a estas líneas la experiencia británica: tiene que ver con una llamada recibida esta semana del presidente de la asociación Amigos de Boal, para invitarme a participar en una de sus actividades.

Lo hacía para recordarme que el día 27 de este mes se cumplirán dos años de la aprobación en el Congreso de los Diputados de una iniciativa que tuve el honor de promover y defender para que la principal demanda de esta asociación se pudiera materializar. ¿Y en que consiste esta demanda? se preguntarán. Pues bien, este grupo de vecinos asturianos lleva tiempo peleando para que las distintas administraciones apuesten por la conservación y puesta en valor de la denominada “Gran Senda del Navia”, una ruta de unos 150 Kilómetros que atraviesa 16 concellos lucenses y asturianos, que transcurre desde el nacimiento del río Navia en el concello de Pedrafita hasta su desembocadura en Navia en la costa Asturiana.

Estoy convencido de que, si estos bellos parajes recorridos por las aguas del Navia estuvieran situados en Gran Bretaña, la National Trust los tendría entre sus bienes a conservar, potenciar y disfrutar, pero aquí sólo la perseverancia de los integrantes de la asociación de amigos de Boal conseguirá algún día que se acometan las inversiones necesarias para convertir esta ruta en una puesta en valor de nuestro enorme patrimonio natural y cultural.

Aquel 27 de abril de 2020 conseguíamos aprobar en el Congreso una petición al Gobierno de España para que declare esta senda como obra de interés general, para incluir el proyecto en el Programa de Caminos Naturales y para que se habiliten todas las formulas de colaboración entre administraciones locales, provinciales y autonómicas, además de la sociedad civil autentica impulsora del proyecto.

Ahora que tanto se habla del abandono de poblaciones del medio rural, la apuesta por esta iniciativa podría suponer nuevas oportunidades de empleo y de fijación de la población en este hermoso valle del Navia, además de poder desatinarse a este fin fondos europeos que hasta la fecha no han sido asignados y corren riesgo de perderse.

El día 27 me uniré a la tercera marcha de senderismo a celebrar en la localidad asturiana de Illano para seguir reivindicando esta demanda civil que sigue llamando la atención sobre los gobiernos para que algún día la gran senda del Navia sea una realidad, y se valore como merece este gran patrimonio natural.  


Patrimonio natural

Cando podo realizo escapadas ao Reino Unido por motivos familiares, e é un país ao que cada día admiro máis polo seu amor para conservar os seus lugares de interese histórico ou de beleza natural. 

Con esa finalidade crearon en 1895 a fundación coñecida como “National Trust” coa intención de coidar, conservar e poñer en valor monumentos e lugares de interese colectivo, entre eles máis de 300 monumentos e máis de 200 xardíns e bosques.

Unha gran parte do seu éxito é a participación masiva de voluntarios especializados en diversas materias, que dedican unha parte do seu tempo a algún destes bens Estamos a falar de nada menos que unhas 60.000 persoas de diferentes idades, colaborando desinteresadamente coa fundación.

Agora direilles por que trouxen a estas liñas a experiencia británica: ten que ver cunha chamada recibida esta semana do presidente da asociación Amigos de Boal, para convidarme a participar nunha das súas actividades.

Facíao para lembrarme que o día 27 deste mes cumpriranse dous anos da aprobación no Congreso dos Deputados dunha iniciativa que tiven a honra de promover e defender para que a principal demanda desta asociación puidésese materializar. E en que consiste esta demanda? preguntaranse. Pois ben, este grupo de veciños asturianos leva tempo pelexando para que as distintas administracións aposten pola conservación e posta en valor da denominada “Gran Senda do Navia”, un roteiro duns 150 Quilómetros que atravesa 16 concellos lucenses e asturianos, que transcorre desde o nacemento do río Navia no concello de Pedrafita ata a súa desembocadura en Navia na costa Asturiana.

Estou convencido de que, se estas belas paraxes percorridas polas augas do Navia estivesen situados en Gran Bretaña, a National Trust teríaos entre os seus bens para conservar, potenciar e gozar, pero aquí só a perseveranza dos integrantes da asociación de amigos de Boal conseguirá algún día que se acometan os investimentos necesarios para converter este roteiro nunha posta en valor do noso enorme patrimonio natural e cultural.

Aquel 27 de abril de 2020 conseguiamos aprobar no Congreso unha petición ao Goberno de España para que declare esta senda como obra de interese xeral, para incluír o proxecto no Programa de Camiños Naturais e para que se habiliten todas formúlalas de colaboración entre administracións locais, provinciais e autonómicas, ademais da sociedade civil autentica impulsora do proxecto.

Agora que tanto se fala do abandono de poboacións do medio rural, a aposta por esta iniciativa podería supoñer novas oportunidades de emprego e de fixación da poboación neste fermoso val do Navia, ademais de poder desatinarse a este fin fondos europeos que ata a data non foron asignados e corren risco de perderse.

O día 27 unireime á terceira marcha de sendeirismo a celebrar na localidade asturiana de Illano para seguir reivindicando esta demanda civil que segue chamando a atención sobre os gobernos para que algún día a gran senda do Navia sexa unha realidade, e valórese como merece este gran patrimonio natural.  

miércoles, 3 de abril de 2024

Guiños

Cansado de leer noticias reiteradas sobre la insostenible tensión política y sus derivaciones, no he podido evitar detenerme a leer otro tipo de crónicas que seguramente pasan más inadvertidas. En esta ocasión el titular decía así: “Un estudio revela que las ranas hembra guiñan el ojo a los machos para coquetear”. De su contenido no voy a dar cuenta aquí, sólo decirles que los científicos de una universidad china han descubierto esta forma de comunicarse entre las ranas hembra y macho mediante el guiño de un ojo como inicio en el ritual de apareamiento, algo que hasta ahora se consideraba exclusivo de algunos primates, y en especial de los humanos.

Su lectura me animó a escribir sobre este asunto a nivel de las personas, algo que descarté rápidamente por temor a que, debido a que por la deriva que en España sufren algunos sectores del feminismo, los mismos que han aplaudido la Ley “trans” o la denominada del “si es si”, me descalificaran sin piedad.

Por ello he preferido buscarle un enfoque más serio al asunto del guiño, y poniéndome serio, otra noticia me ha impactado de manera especial. La de un hombre que habiendo padecido un fuerte ataque al corazón que le dejó en coma durante 20 días por congestión cerebral despertó totalmente paralizado salvo su párpado izquierdo. Con dedicación y aprendizaje acabo comunicándose con el resto del mundo de la manera más básica con su ojo: un parpadeo significaba sí; dos, no. Además, aprendió un alfabeto ordenado por la frecuencia de la aparición de las letras. Con todo consiguió dictar un libro publicado pocos días antes de morir.

Me ha resultado imposible abstraerme de esta nueva lección de superación frente a la adversidad, de reflexionar sobre esos guiños de la vida que se nos muestran a diario y que con mucha frecuencia ignoramos o dejamos pasar.

Muchos no somos conscientes de los privilegios que disfrutamos porque, teniendo salud, tendemos a quejarnos de cualquier contratiempo, mientras otras personas privadas no ya de una buena salud, sino a veces viviendo en cuerpos con serias limitaciones nos dan auténticas lecciones de superación.

Todos conocemos a personas que tienen que luchar a diario para seguir entre nosotros, haciéndonos ver que lo que para muchos es una discapacidad de la que no escaparán, en muchas ocasiones se convierte en todo un guiño a la vida. A todos ellos mi respeto, admiración y reconocimiento. 

Y es que los guiños de la vida no son frecuentes y a pesar de ello cuando se nos presentan los despreciamos: Me ha llamado la atención la cantidad de personas conocidas que en estos días nos han dejado, por edad, enfermedad o accidentes. He leído hermosos obituarios publicados en varios medios de comunicación, y en ellos se destacan las cualidades de esas personas y del recuerdo imborrable que dejan en quienes los conocieron y me pregunto si fuimos capaces de valorar esos valores, esos guiños que nos ofrecían a diario, de percibirlos hasta que la vida nos privó de ellos para siempre. La vida es muy paradójica, valoremos y aprovechemos esos guiños que la vida nos ofrece.


Chiscos

Canso de ler noticias reiteradas sobre a insostible tensión política e as súas derivacións, non puiden evitar determe a ler outro tipo de crónicas que seguramente pasan máis inadvertidas. Nesta ocasión o titular dicía así: “Un estudo revela que as ras femia chiscan o ollo aos machos para coquetear”. Do seu contido non vou dar conta aquí, só dicirlles que os científicos dunha universidade chinesa han descuberto esta forma de comunicarse entre as ras femia e macho mediante o chisco dun ollo como inicio no ritual de apareamento, algo que ata o de agora se consideraba exclusivo dalgúns primates, e en especial dos humanos.

A súa lectura animoume a escribir sobre este asunto a nivel das persoas, algo que descartei rapidamente por temor a que, debido a que pola deriva que en España sofren algúns sectores do feminismo, os mesmos que aplaudiron a Lei “trans” ou a denominada do “se é se”, descualificásenme sen piedade.

Por iso preferín buscarlle un enfoque máis serio ao asunto dos chiscos, e poñéndome serio, outra noticia impactoume de maneira especial. A dun home que padecendo un forte ataque ao corazón que lle deixou en coma durante 20 días por conxestión cerebral espertou totalmente paralizado salvo a súa pálpebra esquerda. Con dedicación e aprendizaxe acabo comunicándose co resto do mundo da maneira máis básica co seu ollo: un parpadeo significaba si; dous, non. Ademais, aprendeu un alfabeto ordenado pola frecuencia da aparición das letras. Con todo conseguiu ditar un libro publicado poucos días antes de morrer.

Resultoume imposible abstraerme desta nova lección de superación fronte á adversidade, de reflexionar sobre eses chiscos da vida que se nos mostran a diario e que con moita frecuencia ignoramos ou deixamos pasar.

Moitos non somos conscientes dos privilexios que gozamos porque, tendo saúde, tendemos a queixarnos de calquera contratempo, mentres outras persoas privadas non xa dunha boa saúde, senón ás veces vivindo en corpos con serias limitacións dannos auténticas leccións de superación.

Todos coñecemos a persoas que teñen que loitar a diario para seguir entre nós, facéndonos ver que o que para moitos é unha discapacidade da que non escaparán, en moitas ocasións convértese en todo un chisco á vida. A todos eles o meu respecto, admiración e recoñecemento. 

E é que os chiscos da vida non son frecuentes e a pesar diso cando se nos presentan desprezámolos: Chamoume a atención a cantidade de persoas coñecidas que nestes días deixáronnos, por idade, enfermidade ou accidentes. Lin fermosos obituarios publicados en varios medios de comunicación, e neles destácanse as calidades desas persoas e do recordo indeleble que deixan en quen os coñeceu e pregúntome se fomos capaces de valorar eses valores, eses chiscos que nos ofrecían a diario, de percibilos ata que a vida privounos deles para sempre. A vida é moi paradoxal, valoremos e aproveitemos eses chiscos que a vida nos ofrece.

miércoles, 20 de marzo de 2024

Lo que no querría tener que contar

Hace un tiempo se me ocurrió regalar a mis nietas, que ya empezaban a escribir, un libro en blanco para que ellas rellenasen sus páginas con historias y vivencias que además podían acompañar de fotos o dibujos. Esta semana he recibido un regalo en nombre de la más pequeña, que todavía está en sus primeros meses de vida. Un libro en blanco titulado “Abuelo, ¿me cuentas tu historia?”. Al pie de su portada dice que lo devuelva lleno de recuerdos. 

Comprenderán que dada mi afición a escribir acabaré contándole en sus páginas, hoy en blanco, muchas de las cosas que me gustaría que conociera de lo que yo he vivido y de lo que espero que me quede todavía por vivir, pero en este artículo voy a poner el foco en cosas que suceden en estos tiempos y que no querría tener que contar.

Lugo es una provincia donde los proyectos industriales de importancia laboral y económica se pueden contar con los demos de una mano. Cuando se anuncia la posibilidad de que un nuevo proyecto se asiente aquí lo deseable sería que el conjunto de las administraciones y la sociedad en general examinasen al detalle las características del mismo, así como todos los impactos positivos y negativos, para finalmente adoptar la decisión que beneficie a nuestra tierra.

En las últimas semanas se han empezado a conocer los detalles de uno de esos proyectos de posible implantación en esta provincia, concretamente en Palas de Rei. Llevamos tiempo esperando que se concreten esos pormenores, al tiempo que denunciando los retrasos del Gobierno de España en definir los fondos europeos que se le puedan asignar y sin los cuales se compromete su viabilidad.

Al tiempo, han empezado a surgir voces contrarias a esta iniciativa, que a priori podría suponer un empujón sin precedentes para toda una comarca y posiblemente para miles de pequeños propietarios de explotaciones forestales de Lugo y Galicia. Esas voces del NON, surgen en un momento en el que se pueden presentar alegaciones y corregir aquellas deficiencias que las autoridades competentes puedan señalar, entre otras, en materia medioambiental, y por lo tanto nadie debería cuestionar la idoneidad de un proyecto hasta conocer su redacción y propuesta final, que evidentemente deberá contar con todas las bendiciones.

Pero esas pancartas del NON a este proyecto me recuerdan otros noes a proyectos que al fin y a la postre fueron vitales para el desarrollo de Galicia. Recuerdo, porque tenía edad para ello en los años 70, el NON a la autopista del Atlántico, que los que entonces consideraban que supondría una “navallada” para nuestra tierra, ahora consideran imprescindible su traspaso competencial a Galicia.

En otras ocasiones los noes vienen de las administraciones de distinto color político al que nos gobierna en Galicia y así, con legislaciones medioambientales arbitrarias y sin consensos, se ponen en peligro miles de puestos de trabajo de la cadena mar-industria, que además en su mayoría lo ocupan las mujeres.

A mi nieta no querría tener que contarle que hubo un tiempo donde a mi tierra, que también es en la que ella nació, se le ofrecieron oportunidades de crear miles de puestos de trabajo de una sola tacada y se frustraron porque ganaron los del NON.

O que non querería ter que contar

Hai un tempo ocorréuseme regalar ás miñas netas, que xa empezaban a escribir, un libro en branco para que elas enchesen as súas páxinas con historias e vivencias que ademais podían acompañar de fotos ou debuxos. Esta semana recibín un agasallo en nome da máis pequena, que aínda está nos seus primeiros meses de vida. Un libro en branco titulado “Avó, cóntasme a túa historia?”. Ao pé da súa portada di que o devolva cheo de recordos. 

Comprenderán que dada a miña afección para escribir acabarei contándolle nas súas páxinas, hoxe en branco, moitas das cousas que me gustaría que coñecese do que eu vivín e do que espero que me quede aínda por vivir, pero neste artigo vou poñer o foco en cousas que suceden nestes tempos e que non querería ter que contar.

Lugo é unha provincia onde os proxectos industriais de importancia laboral e económica pódense contar cos demos dunha man. Cando se anuncia a posibilidade de que un novo proxecto aséntese aquí o desexable sería que o conxunto das administracións e a sociedade en xeral examinasen ao detalle as características do mesmo, así como todos os impactos positivos e negativos, para finalmente adoptar a decisión que beneficie á nosa terra.

Nas últimas semanas empezáronse a coñecer os detalles dun deses proxectos de posible implantación nesta provincia, concretamente en Palas de Rei. Levamos tempo esperando que se concreten eses pormenores, á vez que denunciando os atrasos do Goberno de España en definir os fondos europeos que se lle poidan asignar e sen os cales se compromete a súa viabilidade.

Ao tempo, empezaron a xurdir voces contrarias a esta iniciativa, que a priori podería supoñer un empuxón sen precedentes para toda unha comarca e posiblemente para miles de pequenos propietarios de explotacións forestais de Lugo e Galicia. Esas voces do NON, xorden nun momento no que se poden presentar alegacións e corrixir aquelas deficiencias que as autoridades competentes poidan sinalar, entre outras, en materia ambiental, e por tanto ninguén debería cuestionar a idoneidade dun proxecto ata coñecer a súa redacción e proposta final, que evidentemente deberá contar con todas as bendicións.

Pero esas pancartas do NON a este proxecto lémbranme outros nons a proxectos que ao cabo foron vitais para o desenvolvemento de Galicia. Recordo, porque tiña idade para iso nos anos 70, o NON á autoestrada do Atlántico, que os que entón consideraban que supoñería unha “navallada” para a nosa terra, agora consideran imprescindible o seu traspaso competencial a Galicia.

Noutras ocasións os nons veñen das administracións de distinta cor política ao que nos goberna en Galicia e así, con lexislacións ambientais arbitrarias e sen consensos, póñense en perigo miles de postos de traballo da cadea mar-industria, que ademais na súa maioría ocúpano as mulleres.

Á miña neta non querería ter que contarlle que houbo un tempo onde á miña terra, que tamén é na que ela naceu, ofrecéronselle oportunidades de crear miles de postos de traballo dunha soa tacada e frustráronse porque gañaron os do NON.