miércoles, 10 de mayo de 2023

Reflexionar más tiempo

Lo que ocurre en nuestra calle, en nuestro barrio, en nuestra ciudad, en nuestra provincia, en nuestra tierra o en nuestra nación siempre debería ser motivo de una reflexión diaria. No hacerlo conlleva el riesgo de olvidar aquellas cosas que nos decepcionan, enfadan y, en ocasiones contadas, nos satisfacen. Una dinámica en que el bombardeo de noticias y acontecimientos, unido a las estrategias de comunicación de algunos gobernantes, donde un escándalo tapa al siguiente, un disparate al otro… busca que resulte imposible realizar un ejercicio de memoria que abarque lo ocurrido durante un mandato de cuatro años.

Por ello lo recomendable es reflexionar con frecuencia sobre las cuestiones que nos agradan o decepcionan de las personas en las que en su día depositamos nuestra confianza para gobernar.

Mi particular reflexión abarca las conductas de los responsables políticos de aquellas formaciones que también concurren a las municipales en mi ciudad, en este caso mi partido, el Partido Popular, y el actual gobierno del PSOE y el BNG. Omito las siglas de aquellos a los que las previsiones no otorgan representación alguna.

Al margen de las simpatías personales que cada uno pueda sentir por los candidatos, no debemos olvidar a que formaciones pertenecen y cuáles son sus ideologías y actos. “Por sus frutos los conoceréis” nos dice el evangelio.

En Lugo sus frutos son mas bien escasos cuando no verdaderas chapuzas. Me vienen a mi particular reflexión las gestiones interminables e interminadas para poner en marcha un auditorio que costó más de 20 millones, las disputas internas para culpar al socio de gobierno del fracaso de un carril bici condenado a replantearse en muchos de sus tramos, la incapacidad de poner en funcionamiento instalaciones municipales vinculadas con la hostelería como la cafetería del Parque o la prevista en la vieja cárcel, el sainete de la temperatura de las Caldas incumpliendo normativas sanitarias, las obras de peatonalización poco estudiadas, ejecutadas ignorando las propuestas de vecinos y comerciantes de la zona y acometidas a toda prisa en vísperas de las elecciones porque si no lo hacen se pierden fondos europeos, o el anuncio de estos días de que no van a poder garantizar enterrar a los que fallezcan en estas fechas por falta de personal. Son sólo algunos ejemplos del amplio catálogo de los frutos de este gobierno municipal de coalición que me gustaría tuviese sus días contados.

Finalmente, un apunte sobre las coaliciones, incluyendo el panorama nacional. En España estamos comprobando los resultados, Podemos roto y éstos a la gresca con sus socios socialistas. Un gabinete, un consejo de ministros donde las tensiones y discrepancias son diarias y se mantendrán así hasta su ruptura unas semanas antes de las elecciones generales.

En Lugo la coalición también muestra síntomas semejantes. Las culpas de los problemas, véase el carril bici, se pasan de unos a los otros, llegando a discrepar en cómo respetar y recibir la presencia de nuestro Rey en visita a la ciudad.

Son sólo unos pequeños apuntes para que, cuando le toque decidir en quién deposita su confianza para regir los destinos de esta ciudad, no espere a la jornada de reflexión, no se limite a pensarlo en un solo día. Vaya recordando todo lo que hemos vivido durante estos últimos años y valore si le conviene una coalición de los que no son capaces de ganar individualmente, o darle la oportunidad a quien según todas las encuestas encabeza la lista que más votos recibirá.

La jornada de reflexión llegará, pero la reflexión conviene hacerla durante más tiempo. 


Reflexionar máis tempo

O que ocorre na nosa rúa, no noso barrio, na nosa cidade, na nosa provincia, na nosa terra ou na nosa nación sempre debería ser motivo dunha reflexión diaria. Non facelo conleva o risco de esquecer aquelas cousas que nos decepcionan, enfadan e, en ocasións contadas, satisfannos. Unha dinámica en que o bombardeo de noticias e acontecementos, unido ás estratexias de comunicación dalgúns gobernantes, onde un escándalo tapa ao seguinte, un disparate ao outro… busca que resulte imposible realizar un exercicio de memoria que abarque o ocorrido durante un mandato de catro anos.

Por iso o recomendable é reflexionar con frecuencia sobre as cuestións que nos agradan ou decepcionan das persoas nas que no seu día depositamos a nosa confianza para gobernar.

A miña particular reflexión abarca as condutas dos responsables políticos daquelas formacións que tamén concorren ás municipais na miña cidade, neste caso o meu partido, o Partido Popular, e o actual goberno do PSOE e o BNG. Omito as siglas daqueles aos que as previsións non outorgan representación algunha.

Á marxe das simpatías persoais que cada un poida sentir polos candidatos, non debemos esquecer a que formacións pertencen e cales son as súas ideoloxías e actos. “Polos seus froitos coñecerédelos” dinos o evanxeo.

En Lugo os seus froitos son mais ben escasos cando non verdadeiras chapuzas. Véñenme á miña particular reflexión as xestións interminables e interminadas para poñer en marcha un auditorio que custou máis de 20 millóns, as disputas internas para culpar ao socio de goberno do fracaso dun carril bici condenado a reformularse en moitos dos seus tramos, a incapacidade de poñer en funcionamento instalacións municipais vinculadas coa hostalería como a cafetería do Parque ou a prevista no vello cárcere, o sainete da temperatura das Caldas incumprindo normativas sanitarias, as obras de peonalización pouco estudadas, executadas ignorando as propostas de veciños e comerciantes da zona e acometidas a fume de carozo en vésperas das eleccións porque se non o fan pérdense fondos europeos, ou o anuncio destes días de que non van poder garantir enterrar aos que falezan nestas datas por falta de persoal. Son só algúns exemplos do amplo catálogo dos froitos deste goberno municipal de coalición que me gustaría tivese os seus días contados.

Finalmente, un apuntamento sobre as coalicións, incluíndo o panorama nacional. En España estamos a comprobar os resultados, Podemos roto e estes á gresca cos seus socios socialistas. Un gabinete, un consello de ministros onde as tensións e discrepancias son diarias e manteranse así ata a súa ruptura unhas semanas antes das eleccións xerais.

En Lugo a coalición tamén mostra síntomas semellantes. As culpas dos problemas, véxase o carril bici, pásanse duns aos outros, chegando a discrepar en como respectar e recibir a presenza do noso Rey en visita á cidade.

Son só uns pequenos apuntamentos para que, cando lle toque decidir en quen deposita a súa confianza para rexer os destinos desta cidade, non espere á xornada de reflexión, non se limite a pensalo nun só día. Vaia lembrando todo o que vivimos durante estes últimos anos e valore se lle convén unha coalición dos que non son capaces de gañar individualmente, ou darlle a oportunidade a quen segundo todas as enquisas encabeza a lista que máis votos recibirá.

A xornada de reflexión chegará, pero a reflexión convén facela durante máis tempo. 

miércoles, 26 de abril de 2023

Gestión

El pasado miércoles en el Congreso escuchamos al presidente Sánchez presumir de buen gestor y así dejó frases como: “las políticas progresistas gestionan mejor la economía que el neoliberalismo de la derecha”, o “frente al ruido y la desinformación, nosotros gestión, gestión y gestión”.

Lugo, donde gobierna su partido y tiene en su alcaldesa una gran admiradora de su persona y de sus políticas, es el mejor ejemplo de la gestión de la que presumen, y con unos pocos ejemplos espero que queden convencidos de ello.

¿Hablamos de éxito en la gestión si hablamos de los locales propiedad del Concello destinados a cafeterías? Existen varios, aunque los más representativos por ubicación y popularidad podrían ser la cafetería del Parque Rosalía y la todavía cerrada situada en el edificio de la vieja cárcel donde las vistas apuntan a ser apetecibles, o la ubicada en las instalaciones de ese museo subterráneo, el MIHL, que tampoco llegó a aponerse en servicio. Ejemplos de la nefasta gestión del gobierno municipal incapaz de sacar a concurso en condiciones atractivas de mercado la explotación de locales que seguramente contarían con gran afluencia de ciudadanos.

A pocos días de unas elecciones municipales y después de años gobernando, las prisas por demostrar gestión en asuntos que estuvieron durmiendo en los cajones de sus despachos hacen que parezca que recobran luz, pero sólo es venta electoral. Véase la demolición del mastodóntico proyecto urbanístico conocido por el Garañón. El logro, por lo visto, es tirar abajo una de las vergonzosas imágenes del urbanismo más incomprensible y especulador, que nació a la sombra de un gobierno del PSOE, se desarrolló con la concesión de licencias por ese gobierno, declaradas ilegales, y ahora se pretende finiquitar como un logro y como si aquí no hubiese pasado nada, de nuevo bajo un gobierno socialista. Otro gran ejemplo de esa gestión que tendrá un coste todavía por determinar y que pagaremos de nuestros bolsillos los lucenses, pero que ahora en campaña electoral pretenderán rentabilizar como éxito de gestión.

Si algo gestionan bien son el ruido y la protesta contra los proyectos de otras administraciones para dotar de infraestructuras necesarias a Lugo. Está pasando con una iniciativa de la Xunta de Galicia. Años reivindicando completar una ronda a Lugo y cuando el gobierno gallego aprueba un proyecto para construir la denominada Ronda Este, socialistas y nacionalistas desentierran el hacha de guerra y argumentan daños medioambientales irreparables. Supongo que todos los proyectos son mejorables y con diálogo se deberían solucionar sus carencias, pero uno se pregunta dónde estaban todas estas personas y sus voces tan criticas cuando se levantaron los gigantescos muros de hormigón en las orillas del río Miño para construir el último puente.

Gestionar bien no es gastar fondos europeos a toda prisa porque se terminan los plazos y no se pueden perder. Es lo que va a ocurrir con las anunciadas obras de peatonalización que evidencian falta de planificación y daños irreparables para el centro de Lugo, como ya ocurrió con el carril bici o con edificios supuestamente ecológicos y sin uso conocido.

Frente al ruido y la desinformación, nosotros gestión” dicen los socialistas. Espero que, en mayo, cuando las urnas nos convoquen podamos, con poco ruido y mucha información, cambiar a los gestores de nuestra querida ciudad.

Xestión

O pasado mércores no Congreso escoitamos ao presidente Sánchez presumir de bo xestor e así deixou frases como: “as políticas progresistas xestionan mellor a economía que o neoliberalismo da dereita”, ou “fronte ao ruído e a desinformación, nós xestión, xestión e xestión”.

Lugo, onde goberna o seu partido e ten na súa alcaldesa unha gran admiradora da súa persoa e das súas políticas, é o mellor exemplo da xestión da que presumen, e cuns poucos exemplos espero que queden convencidos diso.

Falamos de éxito na xestión se falamos da locais propiedade do Concello destinados a cafeterías? Existen varios, aínda que os máis representativos por localización e popularidade poderían ser a cafetería do Parque Rosalía e a aínda pechada situada no edificio do vello cárcere onde as vistas apuntan a ser apetecibles, ou a situada nas instalacións dese museo subterráneo, o MIHL, que tampouco chegou a aponerse en servizo. Exemplos da nefasta xestión do goberno municipal incapaz de sacar a concurso en condicións atractivas de mercado a explotación de locais que seguramente contarían con gran afluencia de cidadáns.

A poucos días dunhas eleccións municipais e despois de anos gobernando, as présas por demostrar xestión en asuntos que estiveron a durmir nos caixóns dos seus despachos fan que pareza que recobran luz, pero só é venda electoral. Véxase a demolición do mastodóntico proxecto urbanístico coñecido polo Garañón. O logro, polo visto, é tirar abaixo una das vergoñosas imaxes do urbanismo máis incomprensible e especulador, que naceu á sombra dun goberno do PSOE, desenvolveuse coa concesión de licenzas por ese goberno, declaradas ilegais, e agora preténdese finiquitar como un logro e coma se aquí non pasase nada, de novo baixo un goberno socialista. Outro gran exemplo desa xestión que terá un custo aínda por determinar e que pagaremos dos nosos petos os lucenses, pero que agora en campaña electoral pretenderán rendibilizar como éxito de xestión.

Se algo xestionan ben son o ruído e a protesta contra os proxectos doutras administracións para dotar de infraestruturas necesarias a Lugo. Está a pasar cunha iniciativa da Xunta de Galicia. Anos reivindicando completar unha rolda a Lugo e cando o goberno galego aproba un proxecto para construír a denominada Rolda Leste, socialistas e nacionalistas desentierran o machada de guerra e argumentan danos ambientais irreparables. Supoño que todos os proxectos son mellorables e con diálogo deberíanse solucionar as súas carencias, pero uno pregúntase onde estaban todas estas persoas e as súas voces tan criticas cando se levantaron os xigantescos muros de formigón nas beiras do río Miño para construír a última ponte.

Xestionar ben non é gastar fondos europeos a fume de carozo porque se terminan os prazos e non se poden perder. É o que vai ocorrer coas anunciadas obras de peonalización que evidencian falta de planificación e danos irreparables para o centro de Lugo, como xa ocorreu co carril bici ou con edificios supostamente ecolóxicos e sen uso coñecido.

Fronte ao ruído e a desinformación, nós xestión” din os socialistas. Espero que, en maio, cando as urnas convóquennos podamos, con pouco ruído e moita información, cambiar aos xestores da nosa querida cidade.

miércoles, 12 de abril de 2023

"Un poco parada"

Lo peor que le puede pasar a una sociedad, a los ciudadanos y a las ciudades en las que habitan es que se encuentren “un poco paradas”. Hace pocos días y en este mismo diario el exalcalde socialista López Orozco concedía una amplia entrevista y en ella encontré varias opiniones que seguramente, con matices, podría compartir.

La primera fue una referencia al cada día más deteriorado cuartel de San Fernando, y sobre el que opinaba y cito textualmente “Es que fue una pena perder el auditorio allí. Hubiera sido la salvación del casco histórico y Lugo tendría auditorio desde hace años. Pero había otros intereses”.

Claro que fue una pena, diría algo más, fue un grave error de gestión no hacerlo allí. Lo que lógicamente no aclara en esa entrevista son las razones por las que no se construyó ahí el auditorio, que brevemente trataré de recordar.

En 1999, año en el que el exalcalde tomó posesión, se encontró con un proyecto de auditorio en marcha, fruto de un concurso de ideas en el que todos los grupos políticos de la corporación que me honré en presidir pudieron opinar. También la propiedad del inmueble del cuartel que adquirimos al Ministerio de Defensa y lo más importante, un generoso presupuesto que hubiera permitido iniciar las obras del auditorio.

Cuando se refiere a que había otros intereses, no aclara a cuáles se refiere, pero en otras ocasiones se escudaron en las discrepancias con su socio de coalición, el BNG, y en los informes del organismo ICOMOS que rechazaban la ubicación. Hay que recordar que estos informes no son vinculantes y que la verdadera causa, al menos en mi opinión, fueron las discrepancias internas en un gobierno formado por integrantes de partidos con intereses distintos y sólo unido por el legítimo fin de que no gobernase la lista más votada y a un puñado de votos de la mayoría absoluta, la del Partido Popular.

Claro que fue una pena que no se hubiese construido allí esa importante dotación cultural que Lugo llevaría más de 20 años disfrutando. No sé si sería la salvación del casco histórico, pero sin duda que habría contribuido a minorar el deterioro que padece.

Hoy, 23 años después, y desde junio de 2020 Lugo cuenta con la deseada infraestructura cultural, un moderno auditorio que costó más de 20 millones de euros pagados por la Xunta de Galicia y que el gobierno municipal, de coalición entre socialistas y nacionalistas, no acaba de encontrar la manera de abrir al público con una atractiva agenda de actos culturales. O quizás sí, si nos fijamos en, los movimientos de los últimos días y en los rumores de una posible apertura a pocos días de la cita en las urnas para elegir una nueva corporación municipal. 

En la misma entrevista, Orozco decía que ve a Lugo “un poco parada en los últimos años”, y creo que tiene razón. Ni auditorio, ni proyectos que den ilusión de futuro. 

Posiblemente la solución esté en dotar a nuestra ciudad de un nuevo gobierno, uno unido, que devuelva ese dinamismo perdido por Lugo hace ya más de dos décadas, y dejar para la historia los gobiernos de coalición entre intereses muy diferentes sólo sustentados en mantenerse en el poder a toda costa, aunque sea aplicando políticas contradictorias con el único fin de impedir que gobierne la alcaldable que más votos consiga que todos sabemos, y ellos también, que será Elena Candia.


Un pouco parada

O peor que lle pode pasar a unha sociedade, aos cidadáns e ás cidades nas que habitan é que se atopen “unhas pouco paradas”. Hai poucos días e en leste mesmo diario o exalcalde socialista López Orozco concedía unha ampla entrevista e nela atopei varias opinións que seguramente, con matices, podería compartir.

A primeira foi unha referencia ao cada día máis deteriorado cuartel de San Fernando, e sobre o que opinaba e cito textualmente “É que foi unha pena perder o auditorio alí. Fose a salvación do centro histórico e Lugo tería auditorio desde hai anos. Pero había outros intereses”.

Claro que foi unha pena, diría algo máis, foi un grave erro de xestión non facelo alí. O que loxicamente non aclara nesa entrevista son as razóns polas que non se construíu aí o auditorio, que brevemente tratarei de lembrar.

En 1999, ano no que o exalcalde tomou posesión, atopouse cun proxecto de auditorio en marcha, froito dun concurso de ideas no que todos os grupos políticos da corporación que me honrei en presidir puideron opinar. Tamén a propiedade do inmoble do cuartel que adquirimos ao Ministerio de Defensa e o máis importante, un xeneroso orzamento que permitise iniciar as obras do auditorio.

Cando se refire a que había outros intereses, non aclara a cales se refire, pero noutras ocasións escudáronse nas discrepancias co seu socio de coalición, o BNG, e nos informes do organismo ICOMOS que rexeitaban a localización. Hai que lembrar que estes informes non son vinculantes e que a verdadeira causa, polo menos na miña opinión, foron as discrepancias internas nun goberno formado por integrantes de partidos con intereses distintos e só unido polo lexítimo fin de que non gobernase a lista máis votada e a un puñado de votos da maioría absoluta, a do Partido Popular.

Claro que foi unha pena que non se construíu alí esa importante dotación cultural que Lugo levaría máis de 20 anos gozando. Non se se sería a salvación do centro histórico, pero sen dúbida que contribuiría a minorar a deterioración que padece.

Hoxe, 23 anos despois, e desde xuño de 2020 Lugo conta coa desexada infraestrutura cultural, un moderno auditorio que custou máis de 20 millóns de euros pagos pola Xunta de Galicia e que o goberno municipal, de coalición entre socialistas e nacionalistas, non acaba de atopar a maneira de abrir ao público cunha atractiva axenda de actos culturais. Ou quizais si, se nos fixamos en, os movementos dos últimos días e nos rumores dunha posible apertura a poucos días da cita nas urnas para elixir unha nova corporación municipal. 

Na mesma entrevista, Orozco dicía que ve a Lugo “un pouco parada nos últimos anos”, e creo que ten razón. Nin auditorio, nin proxectos que dean ilusión de futuro. 

Posiblemente a solución estea en dotar á nosa cidade dun novo goberno, un unido, que devolva ese dinamismo perdido por Lugo fai xa máis de dúas décadas, e deixar para a historia os gobernos de coalición entre intereses moi diferentes só sustentados en manterse no poder custe o que custe, aínda que sexa aplicando políticas contraditorias co único fin de impedir que goberne a alcaldable que máis votos consiga que todos sabemos, e eles tamén, que será Elena Candia.

miércoles, 29 de marzo de 2023

Nos salen muy caros

Seguramente hayan reparado en la llamada “publicidad institucional” publicada por el Concello de Lugo y la Diputación Provincial. De esta última sólo hacerles notar que lo que pudieran ser comunicaciones de interés se reducen a publirreportajes que contienen fotografías en que el presidente de la institución provincial es el protagonista, acompañado generalmente de otros cargos de su propio partido. Todo un ejercicio democrático de cómo gastar el dinero de todos los contribuyentes en beneficio electoral propio.

Pero más llamativos si cabe, son los últimos anuncios “institucionales” del Concello de Lugo. En ellos podemos comprobar cómo nos tienen que precisar si es la alcaldesa o se trata de las áreas que llevan sus socios de gobierno, el BNG, colocando la palabra “alcaldía”, a la que últimamente se añade el nombre de la alcaldesa y, en otros casos, su foto, no vaya a ser que en las próximas elecciones no sepamos a quién tenemos que votar.

Así ha ocurrido con la reciente puesta en servicio del paso inferior bajo la carretera nacional VI donde nos recuerdan que fue la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, quien lo impulsó al tiempo que nos invita a “gozar de merienda y música al aire libre” si vamos a la inauguración. No me digan que no es para hacérselo mirar.

En otro anuncio, a página completa y en color, nos anuncian bajo el titular de “Lugo capital de la cultura del Eixo Atlántico”, la feria del libro infantil y juvenil y en el pie de página y en lugar bien visible una foto de nuestra alcaldesa y el logotipo del Concello de Lugo al que añaden en letras mayúsculas “ALCALDÍA”.

También habrán observado que el Teniente de Alcalde Rubén Arroxo, del BNG, no quiere ser menos y cada vez que aparece en alguna nota de prensa o fotografía, trata de desmarcarse de sus socios de gobierno y añade su propio sello dejando claro que es la tenencia de alcaldía y no la alcaldesa quien impulsa determinado proyecto.

Estas cuestiones no tendrían la menor importancia si no fuera porque detrás de estos ejemplos lo que realmente se encuentra es una práctica habitual de los gobiernos de coalición, donde ambas partes tratan de sacar rédito a sus áreas sin coordinación entre las dos porciones del gobierno y, llegado el caso, si algo merece la crítica de los ciudadanos o de los medios de comunicación, las culpas siempre son del otro. Un ejemplo lo tenemos con el fiasco del carril bici, donde el teniente de alcalde del BNG en sus redes sociales deja bien claro que a él no le echen las culpas, que ellos no lo hicieron… aunque lo firmaron como parte del gobierno que son.

En definitiva, los gobiernos de coalición como el de España o el de Lugo, nos salen muy caros. No se coordinan y su gestión es deficiente, cada uno tiene que vender lo suyo y ya no es el Concello quien realiza los proyectos, sino la alcaldía o la tenencia de alcaldía.

Lo que los ciudadanos quieren y necesitan es que su administración más cercana se ocupe de sus problemas y que los esfuerzos se dirijan a eso y no a ver quién de las dos partes vende mejor sus competencias, con o sin meriendas.

Lo dicho, nos salen muy caros y no gestionan bien nuestros recursos. En nuestra mano está cambiar en mayo este modelo.


Sáennos moi caros

Seguramente reparasen na chamada “publicidade institucional” publicada polo Concello de Lugo e a Deputación Provincial. Desta última só facerlles notar que o que puidesen ser comunicacións de interese redúcense a publirreportaxes que conteñen fotografías en que o presidente da institución provincial é o protagonista, acompañado xeralmente doutros cargos do seu propio partido. Todo un exercicio democrático de como gastar o diñeiro de todos os contribuíntes en beneficio electoral propio.

Pero máis rechamantes se cabe, son os últimos anuncios “institucionais” do Concello de Lugo. Neles podemos comprobar como nos teñen que precisar se é a alcaldesa ou se trata das áreas que levan os seus socios de goberno, o BNG, colocando a palabra “alcaldía”, á que ultimamente se engade o nome da alcaldesa e, noutros casos, a súa foto, non vaia a ser que nas próximas eleccións non saibamos a quen temos que votar.

Así ocorreu coa recente posta en servizo do paso inferior baixo a estrada nacional VIN onde nos lembran que foi a alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, quen o impulsou á vez que nos convida a “gozar de merenda e música ao aire libre” se imos á inauguración. Non me digan que non é para facerllo mirar.

Noutro anuncio, a páxina completa e en cor, anúnciannos baixo o titular de “Lugo capital da cultura do Eixo Atlántico”, a feira do libro infantil e xuvenil e no pé de páxina e en lugar ben visible unha foto da nosa alcaldesa e o logotipo do Concello de Lugo ao que engaden en letras maiúsculas “ALCALDÍA”.

Tamén observarían que o Tenente de Alcalde Rubén Arroxo, do BNG, non quere ser menos e cada vez que aparece nalgunha nota de prensa ou fotografía, trata de desmarcarse dos seus socios de goberno e engade o seu propio selo deixando claro que é a tenencia de alcaldía e non a alcaldesa quen impulsa determinado proxecto.

Estas cuestións non terían a menor importancia se non fose porque detrás destes exemplos o que realmente se atopa é unha práctica habitual dos gobernos de coalición, onde ambas as partes tratan de sacar rédito ás súas áreas sen coordinación entre as dúas porcións do goberno e, chegado o caso, se algo merece a crítica dos cidadáns ou dos medios de comunicación, as culpas sempre son do outro. Un exemplo témolo co fracaso do carril bici, onde o tenente de alcalde do BNG nas súas redes sociais deixa ben claro que a el non lle boten as culpas, que eles non o fixeron… aínda que o asinaron como parte do goberno que son.

En definitiva, os gobernos de coalición como o de España ou o de Lugo, sáennos moi caros. Non se coordinan e a súa xestión é deficiente, cada un ten que vender o seu e xa non é o Concello quen realiza os proxectos, senón a alcaldía ou a tenencia de alcaldía.

O que os cidadáns queren e necesitan é que a súa administración máis próxima ocúpese dos seus problemas e que os esforzos se dirixan a iso e non a ver quen das dúas partes vende mellor as súas competencias, con ou sen merendas.

O devandito, sáennos moi caros e non xestionan ben os nosos recursos. Na nosa man está cambiar en maio este modelo.

miércoles, 15 de marzo de 2023

Clima político irrespirable

A pocos se les escapa que el clima político actual, dentro y fuera del Congreso de los Diputados, es cada día más irrespirable. Para ejemplo las últimas descalificaciones cruzadas entre diputados de las formaciones que apoyan a este Gobierno llamado de coalición y que algunos acertadamente han bautizado como de colisión. 

Hemos escuchado a unos llamar fascistas a sus socios y a éstos replicarles llamándoles charlatanes incompetentes e incapaces de resolver los líos que generan.

Los ciudadanos están muy hartos de este clima irrespirable que en nada ayuda a la búsqueda de soluciones a los verdaderos problemas que nos acucian a diario: suben las hipotecas, la cesta de la compra, los precios de la energía y los combustibles, y todo mientras los pequeños negocios en Lugo y en muchos otros lugares se ven obligados a cerrar sus puertas por la voracidad recaudatoria del Gobierno.

Pero si por algo está pasando a la historia este Presidente del Gobierno de España ha sido por buscar la confrontación y la división entre españoles, y últimamente entre las mujeres. Y vaya si lo ha conseguido, hasta el punto de tenerla de manera palmaria en el propio seno de su Consejo de ministros.

Hay que poner fin a este circo, a este clima político. Es imprescindible volver cuanto antes a la buena convivencia y a la tolerancia entre los que piensan de manera distinta, acabar con el comportamiento sectario actual, dejando de señalar a jueces, empresarios, periodistas e incluso instituciones, por el mero hecho de no pensar o actuar como desean desde el Gobierno. Es imprescindible acabar con tanta política insidiosa y dejar de practicar la doble moral juzgando y actuando en función del bando en que se sitúen las personas.

A estas alturas lo que tenemos que ofrecer desde la política, son ideas útiles, personas competentes y honestas, que digan la verdad por dura que resulte y, en definitiva, un plan que devuelva al país confianza, certeza y unidad.

Hay que garantizar un futuro para los más jóvenes y no una herencia envenenada en forma de endeudamiento para toda su vida. Asegurar sus pensiones, pero también propiciar un escenario donde encuentren trabajo, lo que garantizará cotizaciones y con ello las pensiones actuales y futuras.

Si este diagnóstico lo hago a nivel nacional, en lo local, en lo que se refiere a Lugo y su provincia, se acerca el momento de conseguir gobiernos estables preocupados de sacarnos del aislamiento en comunicaciones y de la falta de apoyos a los proyectos empresariales que generarían miles de puestos de trabajo y que por ahora solo están recibiendo indiferencias institucionales.

Inversiones como las de la fábrica de fibras textiles de Altri en Palas de Rei, las de Alcoa en A Mariña, el corredor atlántico ferroviario, las demandadas autovías y conexiones ferroviarias, son sólo algunos de los ejemplos que requieren de esa política de unidad entre todas las fuerzas políticas, coordinadas con empresarios y sociedad civil.

Si los gobernantes actuales no saben o no quieren impulsar éstos y otros proyectos imprescindibles para no quedar definitivamente aislados, en mayo todos tendremos voz y voto para exigírselos a otros.


Clima político irrespirable

A poucos se lles escapa que o clima político actual, dentro e fóra do Congreso dos Deputados, é cada día máis irrespirable. Para exemplo as últimas descualificacións cruzadas entre deputados das formacións que apoian a este Goberno chamado de coalición e que algúns acertadamente bautizaron como de colisión. 

Escoitamos a uns chamar fascistas aos seus socios e a estes replicarlles chamándolles charlatáns incompetentes e incapaces de resolver as leas que xeran.

Os cidadáns están moi fartos deste clima irrespirable que en nada axuda á procura de solucións aos verdadeiros problemas que nos aburan a diario: soben as hipotecas, a cesta da compra, os prezos da enerxía e os combustibles, e todo mentres os pequenos negocios en Lugo e en moitos outros lugares ven obrigados a pechar as súas portas pola voracidade recadatoria do Goberno.

Pero se por algo está a pasar á historia este Presidente do Goberno de España foi por buscar a confrontación e a división entre españois, e ultimamente entre as mulleres. E vaia se o conseguiu, ata o punto de tela de maneira manifesta no propio seo do seu Consello de ministros.

Hai que poñer fin a este circo, a este clima político. É imprescindible volver canto antes á boa convivencia e á tolerancia entre os que pensan de maneira distinta, acabar co comportamento sectario actual, deixando de sinalar a xuíces, empresarios, xornalistas e mesmo institucións, polo mero feito de non pensar ou actuar como desexan desde o Goberno. É imprescindible acabar con tanta política insidiosa e deixar de practicar a dobre moral xulgando e actuando en función do bando en que se sitúen as persoas.

A estas alturas o que temos que ofrecer desde a política, son ideas útiles, persoas competentes e honestas, que digan a verdade por dura que resulte e, en definitiva, un plan que devolva ao país confianza, certeza e unidade.

Hai que garantir un futuro para os máis novos e non unha herdanza envelenada en forma de endebedamento para toda a súa vida. Asegurar as súas pensións, pero tamén propiciar un escenario onde atopen traballo, o que garantirá cotizacións e con iso as pensións actuais e futuras.

Se este diagnóstico fágoo a nivel nacional, no local, no que se refire a Lugo e a súa provincia, achégase o momento de conseguir gobernos estables preocupados de sacarnos do illamento en comunicacións e da falta de apoios aos proxectos empresariais que xerarían miles de postos de traballo e que por agora só están a recibir indiferenzas institucionais.

Investimentos como as da fábrica de fibras téxtiles de Altri en Palas de Rei, as de Alcoa na Mariña, o corredor atlántico ferroviario, as demandadas autovías e conexións ferroviarias, son só algúns dos exemplos que requiren desa política de unidade entre todas as forzas políticas, coordinadas con empresarios e sociedade civil.

Se os gobernantes actuais non saben ou non queren impulsar estes e outros proxectos imprescindibles para non quedar definitivamente illados, en maio todos teremos voz e voto para esixirllos a outros.

miércoles, 1 de marzo de 2023

¡Qué más nos puede pasar!

Que nuestra provincia de Lugo presenta graves carencias en materia de comunicaciones e infraestructuras es algo que ya no se discute. Que los agravios comparativos con otras zonas de España son cada día más evidentes, tampoco.

Durante los últimos meses hemos asistido con cierta resignación a acontecimientos que han confirmado el serio deterioro y estado en el que se encuentran nuestras infraestructuras en materia de comunicaciones. 

En la principal vía de transportes por carretera, la autovía del noroeste la A6, el desplome de uno de sus viaductos mientras se procedía a trabajos de mantenimiento dio comienzo a un periodo de practica incomunicación para la entrada y salida por autovía de una gran parte de Galicia con la meseta y viceversa. Un periodo que cada día se alarga más porque desde el Gobierno se anuncian plazos de finalización a seguramente más de dos años. Nuestra principal autovía cortada durante años.

A esta situación y más recientemente, se unía un corte por derrumbamiento de la única carretera nacional que recorre la Mariña lucense, a falta de la reiteradamente prometida autovía.

Para desplazarse a la capital de Galicia la autovía A-54 cada día ve más retrasada su terminación, siendo la última previsión del Gobierno, para finales del 2024. Dos años más de espera.

De la autovía entre Lugo y Ourense nada se sabe, y lo que es más grave, a la actual carretera nacional no acaban de renovarle su firme, siendo cada día más peligroso viajar por ella sin dejarse una rueda o tener un accidente.

De la situación en que se encuentran las infraestructuras ferroviarias, sin comentarios. Nos habían comprometido una nueva conexión entre Lugo y Ourense para enlazar con la Alta Velocidad y lo que nos están dando es un remozamiento de la actual vía sin acortar un solo kilómetro, al eliminarse del proyecto inicial las variantes que contemplaba y que permitirían reducir el tiempo de viaje entre ambas ciudades. Para mayor agravio, lo que se está ejecutando lleva años en obras y obliga a traslados en autobús hasta Ourense, lo que acaba de echar atrás a cualquier intento de viajar en tren.

En resumen, poca obra nueva y nada de conservación en las que ya empiezan a dar síntomas de deterioro.

Si en la provincia el panorama se acerca a lo descrito, en la ciudad de Lugo las cosas no pintan mejor. Años peleando por un auditorio y cuando la Xunta lo entrega al Concello éste no acaba de querer gestionarlo poniendo constantes disculpas.

Seguimos sin trenes, pero la prioridad del gobierno municipal es tirar el edificio de la estación y construir una nueva Intermodal.

Eso sí, en vísperas de las elecciones municipales de mayo, ahora todo se vuelve en enseñarnos muchos dibujos, para una nueva plaza de la Constitución, para el barrio del Carmen, y un sinfín de propuestas que se quedarán, si los ciudadanos no lo remediamos, en eso, en anuncios electorales rivalizando entre los dos partidos que gobiernan este ayuntamiento.

Lugo se está quedando aislada, y no sé qué más nos puede pasar para reaccionar. 


Que máis nos pode pasar!

Que a nosa provincia de Lugo presenta graves carencias en materia de comunicacións e infraestruturas é algo que xa non se discute. Que os agravios comparativos con outras zonas de España son cada día máis evidentes, tampouco.

Durante os últimos meses asistimos con certa resignación a acontecementos que confirmaron a seria deterioración e estado no que se atopan as nosas infraestruturas en materia de comunicacións. 

Na principal vía de transportes por estrada, a autovía do noroeste a A6, o esborralle dun dos seus viadutos mentres se procedía a traballos de mantemento deu comezo a un período de practica incomunicación para a entrada e saída por autovía dunha gran parte de Galicia coa meseta e viceversa. Un período que cada día alóngase máis porque desde o Goberno anúncianse prazos de finalización a seguramente máis de dous anos. A nosa principal autovía cortada durante anos.

A esta situación e máis recentemente, uníase un corte por derrubamento da única estrada nacional que percorre a Mariña lucense, a falta da reiteradamente prometida autovía.

Para desprazarse á capital de Galicia a autovía A-54 cada día ve máis atrasada a súa terminación, sendo a última previsión do Goberno, para finais do 2024. Dous anos máis de espera.

Da autovía entre Lugo e Ourense nada se sabe, e o que é máis grave, á actual estrada nacional non acaban de renovarlle o seu firme, sendo cada día máis perigoso viaxar por ela sen deixarse unha roda ou ter un accidente.

Da situación en que se atopan as infraestruturas ferroviarias, sen comentarios. Comprometérannos unha nova conexión entre Lugo e Ourense para enlazar coa Alta Velocidade e o que nos están dando é un remozado da actual vía sen acurtar un só quilómetro, ao eliminarse do proxecto inicial as variantes que contemplaba e que permitirían reducir o tempo de viaxe entre ambas as cidades. Para maior agravio, o que se está executando leva anos en obras e obriga a traslados en autobús ata Ourense, o que acaba de botar atrás a calquera intento de viaxar en tren.

En resumo, pouca obra nova e nada de conservación nas que xa empezan a dar síntomas de deterioración.

Se na provincia o panorama achégase ao descrito, na cidade de Lugo as cousas non pintan mellor. Anos pelexando por un auditorio e cando a Xunta entrégao ao Concello este non acaba de querer xestionalo poñendo constantes desculpas.

Seguimos sen trens, pero a prioridade do goberno municipal é tirar o edificio da estación e construír unha nova Intermodal.

Iso si, en vésperas das eleccións municipais de maio, agora todo se volve en ensinarnos moitos debuxos, para unha nova praza da Constitución, para o barrio do Carmen, e unha infinidade de propostas que quedarán, se os cidadáns non o remediamos, niso, en anuncios electorais rivalizando entre os dous partidos que gobernan este concello.

Lugo está a quedarse illada, e non se que máis nos pode pasar para reaccionar. 

miércoles, 15 de febrero de 2023

Un año después

Se cumple hoy un año de la mayor tragedia sufrida en décadas por la familia marinera española. El 15 de febrero del 2022, en las lejanas aguas de Terranova, se hundía el barco gallego “Villa de Pitanxo” con una tripulación de 24 marineros y un trágico balance: 21 tripulantes fallecidos, 12 de ellos desaparecidos.

Como portavoz de pesca en el Congreso de los diputados, como gallego y como persona sensible al dolor ajeno mantuve desde ese mismo día un contacto cercano con las familias de los desaparecidos y fallecidos, comprobando cómo a la tristeza por la pérdida de un ser querido se añadía la rabia por el abandono desde las instancias gubernamentales responsables de la toma de decisiones para iniciar la búsqueda de los desaparecidos primero, la repatriación de los cuerpos recuperados después, o la puesta en marcha de un complejo dispositivo de localización del barco hundido para poder esclarecer las causas del naufragio y evitar sucesos similares en el futuro.

En aquellos primeros días escuché a las familias expresiones como “nos sentimos abandonadas”, “desidia intolerable”, “falta de humanidad”... y otras más duras. 

Después llegarían los 9 cuerpos que pudieron recuperarse en las gélidas aguas, y el presidente Sánchez al pie del avión que los traía les prometía a todos los familiares que “haría lo posible y lo imposible” en lo que todavía quedaba por hacer.

Siguieron días, semanas y meses de mucho dolor, con la renuncia a poder recuperar los cuerpos de los 12 desaparecidos, pero con la firme reivindicación de que el Gobierno pusiese en marcha el operativo de bajar al buque hundido. Fuimos muchos los que apoyamos sin dudar esa petición. También las instituciones que se sumaron aprobando iniciativas en ese sentido con el objetivo de colaborar con la Justicia y conocer la verdad, porque como los familiares repiten “todos tenemos derecho a conocerla y el Gobierno la obligación de buscarla”.

Ha pasado un año en el que la perseverancia y la lucha de estas familias va consiguiendo, paso a paso, que la falta de voluntad política inicial se vaya revirtiendo y ahora se hable ya de la puesta en marcha de un operativo que pueda localizar el pecio del barco, bajar hasta allí y realizar un reportaje que aporte pruebas para esclarecer lo que ocurrió aquel día, donde la Fiscalía dijo en su momento que apreciaba indicios de homicidio imprudente en el hundimiento. 

En muchas ocasiones dije públicamente que la pesca sólo es noticia cuando ocurre una desgracia en la mar y créanme que no me parece justo. España es la primera potencia europea de pesca y los miles de hombres y mujeres que lo hacen posible y que con su trabajo duro y sacrificado nos permiten incluir en nuestra dieta alimentos muy saludables, merecen nuestra atención no sólo cuando la mar arrebata la vida a algunos de ellos.

Por eso estas letras pretenden llamar la atención hoy, cuando se cumple un año de esta tragedia, sobre el trabajo y la vida de hombres y mujeres, embarcados o a pie, en aguas lejanas o en las próximas a sus pueblos costeros, para que sepamos que están todos los días haciendo un duro trabajo. También para que recuerden a los familiares de los 21 fallecidos en aquella trágica noche, para que los acompañemos, cada uno desde sus posibilidades, en la consecución del objetivo que siguen peleando todavía, un año después.


Un ano despois

cúmprese hoxe un ano da maior traxedia sufrida en décadas pola familia mariñeira española. O 15 de febreiro do 2022, nas afastadas augas de Terranova, afundíase o barco galego “Villa de Pitanxo” cunha tripulación de 24 mariñeiros e un tráxico balance: 21 tripulantes falecidos, 12 deles desaparecidos.

Como portavoz de pesca no Congreso dos deputados, como galego e como persoa sensible á dor allea mantiven desde ese mesmo día un contacto próximo coas familias dos desaparecidos e falecidos, comprobando como á tristeza pola perda dun ser querido engadíase a rabia polo abandono desde as instancias gobernamentais responsables da toma de decisións para iniciar a procura dos desaparecidos primeiro, a repatriación dos corpos recuperados despois, ou a posta en marcha dun complexo dispositivo de localización do barco afundido para poder esclarecer as causas do naufraxio e evitar sucesos similares no futuro.

Naqueles primeiros días escoitei ás familias expresións como “sentimos abandonadas”, “desidia intolerable”, “falta de humanidade”... e outras máis duras. 

Despois chegarían os 9 corpos que puideron recuperarse nas xélidas augas, e o presidente Sánchez ao pé do avión que os traía prometíalles a todos os familiares que “faría o posible e o imposible” no que aínda quedaba por facer.

Seguiron días, semanas e meses de moita dor, coa renuncia para poder recuperar os corpos dos 12 desaparecidos, pero coa firme reivindicación de que o Goberno puxese en marcha o operativo de baixar ao buque afundido. Fomos moitos os que apoiamos sen dubidar esa petición. Tamén as institucións que se sumaron aprobando iniciativas nese sentido co obxectivo de colaborar coa Xustiza e coñecer a verdade, porque como os familiares repiten “todos temos dereito a coñecela e o Goberno a obrigación de buscala”.

Pasou un ano no que a perseveranza e a loita destas familias vai conseguindo, paso a paso, que a falta de vontade política inicial se vaia revertendo e agora fálese xa da posta en marcha dun operativo que poida localizar o pecio do barco, baixar ata alí e realizar unha reportaxe que achegue probas para esclarecer o que ocorreu aquel día, onde a Fiscalía dixo no seu momento que apreciaba indicios de homicidio imprudente no afundimento. 

En moitas ocasións dixen publicamente que a pesca só é noticia cando ocorre unha desgraza na mar e créanme que non me parece xusto. España é a primeira potencia europea de pesca e os miles de homes e mulleres que o fan posible e que co seu traballo duro e sacrificado permítennos incluír na nosa dieta alimentos moi saudables, merecen a nosa atención non só cando a mar arrebata a vida a algúns deles.

Por iso estas letras pretenden chamar a atención hoxe, cando se cumpre un ano desta traxedia, sobre o traballo e a vida de homes e mulleres, embarcados ou a pé, en augas afastadas ou nas próximas aos seus pobos costeiros, para que saibamos que están todos os días facendo un duro traballo. Tamén para que lembren aos familiares dos 21 falecidos naquela tráxica noite, para que os acompañemos, cada un desde as súas posibilidades, na consecución do obxectivo que seguen pelexando aínda, un ano despois.

miércoles, 1 de febrero de 2023

Recuperar la convivencia

Aunque no es necesario explicar lo que significa la palabra convivencia, el diccionario incluye en su definición, además de la acción de convivir, la precisión de hacerlo en armonía, definiendo esta última palabra como la buena correspondencia entre personas.

El deterioro durante los últimos años de esa buena convivencia es algo que ya hemos podido comprobar en nuestra ciudad. De poco sirve acudir a las estadísticas para justificar que vivimos en una ciudad segura, si el número de altercados en la vía publica sigue presente y la violencia de éstos es cada día más alarmante. Es difícil encontrar en este diario una semana sin noticias relacionadas con peleas callejeras con resultados de lesiones muy serias.

Tampoco nos son ajenas las preocupaciones que nos generan las noticias relacionadas con las agresiones sexuales, mientras cada día se siguen incrementando las rebajas de penas a los violadores, cuando no sus excarcelaciones.

Finalmente, un tercer ejemplo no menos importante del enrarecimiento en la convivencia social son las denominadas “okupaciones” de viviendas, donde nuevamente se vuelve a recurrir a estadísticas para minimizar las consecuencias y restar importancia a este fenómeno en nuestra ciudad. Por ello, no me parecieron acertadas las palabras de nuestra alcaldesa vinculando las ocupaciones con la falta de vivienda pública en Lugo, algo similar a comparar y justificar los robos por la falta de ingresos del que roba.

Estamos ante una espiral de ataques a la propiedad privada muchas veces alentados, por acción o por omisión, de irresponsables políticas populistas amparadas por gobiernos socialistas, que otorgan más derecho a los delincuentes que a sus víctimas, proponiendo despenalizar las ocupaciones, fomentar las expropiaciones o limitar las rentas en el alquiler.

Están vendiendo la protección del derecho a una vivienda mediante el aliento de la privación del derecho a la propiedad, y este es uno de los orígenes del incremento de estas ocupaciones.

Las leyes deben de estar del lado de las víctimas de las ocupaciones y hoy por hoy los propietarios que sufren este serio problema se ven desamparados e inmersos en larguísimos procesos judiciales mientras se hacen cargo de los gastos de luz, agua, comunidad... de sus viviendas ocupadas.

Desde el Partido Popular presentamos medidas como el desalojo de viviendas ocupadas ilegalmente en un plazo máximo de 48 horas, el refuerzo del delito de usurpación, la penalización expresa a las mafias que negocian con la okupación, o dar potestad a las comunidades de vecinos para que puedan ejercer acciones preventivas.  Estas y otras medidas estaban contempladas una Proposición de Ley Orgánica presentada en el Congreso y que socialistas y populistas votaron en contra.

Las soluciones para mejorar la convivencia en la ciudad no pasan por sustituir puertas y ventanas o tapiarlas con ladrillo, ni en mirar para otro lado ante las peleas en las calles, ni en persistir en mantener una Ley que ha demostrado ser beneficiosa para los delincuentes sexuales.

Recuperar la convivencia pasa por respetar las leyes y hacerlas cumplir por quienes hoy ejercen el poder y la autoridad. Sin matices.


Recuperar a convivencia

Aínda que non é necesario explicar o que significa a palabra convivencia, o dicionario inclúe na súa definición, ademais da acción de convivir, a precisión de facelo en harmonía, definindo esta última palabra como a boa correspondencia entre persoas.

A deterioración durante os últimos anos desa boa convivencia é algo que xa puidemos comprobar na nosa cidade. De pouco serve acudir ás estatísticas para xustificar que vivimos nunha cidade segura, se o número de altercados na vía publica segue presente e a violencia destes é cada día máis alarmante. É difícil atopar neste diario unha semana sen noticias relacionadas con pelexas nas rúas con resultados de lesións moi serias.

Tampouco nos son alleas as preocupacións que nos xeran as noticias relacionadas coas agresións sexuais, mentres cada día séguense incrementando as rebaixas de penas aos violadores, cando non as súas excarceracións.

Finalmente, un terceiro exemplo non menos importante do enrarecemento na convivencia social son as denominadas “okupaciones” de vivendas, onde novamente vólvese a recorrer a estatísticas para minimizar as consecuencias e restar importancia a este fenómeno na nosa cidade. Por iso, non me pareceron acertadas as palabras da nosa alcaldesa vinculando as ocupacións coa falta de vivenda pública en Lugo, algo similar a comparar e xustificar os roubos pola falta de ingresos do que rouba.

Estamos fronte unha espiral de ataques á propiedade privada moitas veces alentados, por acción ou por omisión, de irresponsables políticas populistas amparadas por gobernos socialistas, que outorgan máis dereito aos delincuentes que ás súas vítimas, propoñendo despenalizar as ocupacións, fomentar as expropiacións ou limitar as rendas no alugueiro.

Están a vender a protección do dereito a unha vivenda mediante o alento da privación do dereito á propiedade, e leste é un das orixes do incremento destas ocupacións.

As leis deben de estar ao lado das vítimas das ocupacións e neste momento os propietarios que sofren este serio problema ven desamparados e inmersos en longuísimos procesos xudiciais mentres se fan cargo dos gastos de luz, auga, comunidade... das súas vivendas ocupadas.

Desde o Partido Popular presentamos medidas como o desaloxo de vivendas ocupadas ilegalmente nun prazo máximo de 48 horas, o reforzo do delito de usurpación, a penalización expresa ás mafias que negocian coa okupación, ou dar potestade ás comunidades de veciños para que poidan exercer accións preventivas.  Estas e outras medidas estaban contempladas unha Proposición de Lei Orgánica presentada no Congreso e que socialistas e populistas votaron en contra.

As solucións para mellorar a convivencia na cidade non pasan por substituír portas e xanelas ou tapialas con ladrillo, nin en mirar para outro lado fronte as pelexas nas rúas, nin en persistir en manter unha Lei que demostrou ser beneficiosa para os delincuentes sexuais.

Recuperar a convivencia pasa por respectar as leis e facelas cumprir por quen hoxe exercen o poder e a autoridade. Sen matices.

miércoles, 18 de enero de 2023

Un antes y un después

En las vidas de cada uno de nosotros siempre han existido un antes y un después para muchas de nuestras vivencias. Hay acontecimientos, efemérides, celebraciones, logros, decepciones... que marcan de distintas maneras nuestras vidas.

Pero al margen de nuestras vivencias personales, también hay acontecimientos globales que nos marcan y condicionan. Por referirme sólo a los más recientes, la pandemia del COVID, las políticas populistas o la guerra a las puertas de Europa son algunos ejemplos que están marcando un antes y un después para muchas de las cosas que nos afectan más directamente.

Estos días en los medios de comunicación se hablaba de la seguridad en las calles, del incremento de peleas y altercados nocturnos, de una menor tolerancia social o de una perdida de respeto a la autoridad, después de la pandemia. También del incremento importante en las estafas por internet, la ciberdelincuencia o los robos con fuerza en domicilios o establecimientos. Según criterios de expertos, la encadenación de la crisis económica con la sanitaria del COVID y la que está provocando la guerra en Ucrania, ha sido un caldo de cultivo que ha impactado de lleno en la sociedad provocando estos comportamientos.

Son muchos, especialmente los más jóvenes, los que ahora toleran peor cualquier contratiempo o frustración lo que genera sentimientos de rabia e ira que en muchas ocasiones terminan en reacciones violentas. El concepto de autoridad, en casa, en los colegios o en la calle, parece haberse diluido. En esto ha habido un antes y un después.

Las políticas populistas impulsadas desde el gobierno presidido por Pedro Sánchez también están sentando las bases para poder apreciar claramente un antes y un después en muchos ámbitos del día a día. La cultura de la subvención y los subsidios generalizados han generado cambios en el mercado del trabajo hasta el punto de que resulte muy difícil encontrar en algunos sectores personas dispuestas a cubrir las vacantes necesarias para mantener la actividad. El resurgir de las políticas de enfrentamiento, resucitando viejas heridas que creíamos superadas, están provocando un enrarecimiento de la convivencia y que alcanzar acuerdos resulte una quimera.

Pero en nuestro día a día también las medidas implementadas por la administración han cambiado bruscamente nuestra forma de relacionarnos con ella, de acercarnos a sus ventanillas. Ahora todavía son muchas las administraciones que impiden acudir a sus sedes sin una cita previa solicitada telefónicamente, lo que demora en semanas la gestión a realizar. Los trámites presenciales se ven rápidamente sustituidos por los procedimientos digitales a través de internet, lo que sin duda alguna está generando una brecha digital en las personas mayores o con menos recursos. 

Las reuniones telemáticas en lugar de presenciales, las mascarillas en el transporte, tantas y tantas cosas que aparecieron de la noche a la mañana en nuestras vidas han provocado y lo seguirán haciendo un antes y un después. Algunas ya no podremos cambiarlas, pero otras muchas sí que están en nuestra mano y la resignación no es una buena opción.  


Un antes e un despois

Nas vidas de cada un de nós sempre existiron un antes e un despois para moitas das nosas vivencias. Hai acontecementos, efemérides, celebracións, logros, decepcións... que marcan de distintas maneiras as nosas vidas.

Pero á marxe das nosas vivencias persoais, tamén hai acontecementos globais que nos marcan e condicionan. Por referirme só aos máis recentes, a pandemia do COVID, as políticas populistas ou a guerra ás portas de Europa son algúns exemplos que están a marcar un antes e un despois para moitas das cousas que nos afectan máis directamente.

Estes días nos medios de comunicación falábase da seguridade nas rúas, do incremento de pelexas e altercados nocturnos, dunha menor tolerancia social ou dunha perdida de respecto á autoridade, despois da pandemia. Tamén do incremento importante nas estafas por internet, a ciberdelincuencia ou os roubos con forza en domicilios ou establecementos. Segundo criterios de expertos, a encadenación da crise económica coa sanitaria do COVID e a que está a provocar a guerra en Ucraína, foi un caldo de cultivo que impactou de cheo na sociedade provocando estes comportamentos.

Son moitos, especialmente os máis novos, os que agora toleran peor calquera contratempo ou frustración o que xera sentimentos de rabia e ira que en moitas ocasións terminan en reaccións violentas. O concepto de autoridade, en casa, nos colexios ou na rúa, parece diluírse. Nisto houbo un antes e un despois.

As políticas populistas impulsadas desde o goberno presidido por Pedro Sánchez tamén están a sentar as bases para poder apreciar claramente un antes e un despois en moitos ámbitos do día a día. A cultura da subvención e os subsidios xeneralizados han xerado cambios no mercado do traballo ata o punto de que resulte moi difícil atopar nalgúns sectores persoas dispostas a cubrir as vacantes necesarias para manter a actividade. O rexurdir das políticas de enfrontamento, resucitando vellas feridas que criamos superadas, están a provocar un enrarecemento da convivencia e que alcanzar acordos resulte unha quimera.

Pero no noso día a día tamén as medidas implantadas pola administración cambiaron bruscamente a nosa forma de relacionarnos con ela, de achegarnos aos seus portelos. Agora aínda son moitas as administracións que impiden acudir ás súas sedes sen unha cita previa solicitada telefonicamente, o que demora en semanas a xestión para realizar. Os trámites presenciais ven rapidamente substituídos polos procedementos dixitais a través de internet, o que sen ningunha dúbida está a xerar unha fenda dixital nas persoas maiores ou con menos recursos. 

As reunións telemáticas en lugar de presenciais, as máscaras no transporte, tantas e tantas cousas que apareceron da noite para a mañá nas nosas vidas provocaron e seguirano facendo un antes e un despois. Algunhas xa non poderemos cambialas, pero outras moitas si que están na nosa man e a resignación non é unha boa opción.  

miércoles, 4 de enero de 2023

Calendarios

Hasta hace relativamente poco tiempo en los días finales del año el regalo de calendarios de pared o de mesa era una costumbre generalizada que va cediendo su paso ante la invasión de lo digital. Hoy todos tenemos calendarios en los móviles, tabletas, ordenadores...

Con el cambio de calendario de un año para el siguiente tendemos a pensar que con las hojas caducadas también se marchan los viejos problemas y las consiguientes preocupaciones, de igual manera que con la apertura del nuevo calendario del año que se estrena los nuevos propósitos ocupan rápidamente los días que vienen por delante.

Comienza 2023 y no son pocos los que vaticinan que será un año intenso y complicado, donde las diferentes convocatorias electorales propiciarán que la convivencia y el deseado buen clima social se vea más que alterado.

También los comienzos de cualquier año llevan consigo listas de incertidumbres, como todo lo que tiene que ver con acertar sucesos futuribles. No son pocos los del 2023. Desde los más globales como las guerras, en especial la que se lleva librando muchos meses en Ucrania, a las puertas de Europa, hasta las repercusiones de los nuevos brotes y variantes del COVID, que viendo las noticias que nos llegan desde China hacen que resurja en nuestra memoria todo lo que vivimos en el 2020.

Pero también en nuestro país las incertidumbres no faltan. La evolución de los precios de los alimentos, los combustibles ya sin bonificaciones, el futuro del sistema de pensiones, los resultados de las diferentes jornadas electorales, empezando por las municipales y autonómicas de mayo...

Y todavía más cercano, lo que pueda acontecer en Lugo, donde el actual bigobierno municipal lo fiará todo a que el Partido Popular se quede a las puertas de la mayoría para volver a reeditar sus pactos. En mi lista de deseos para este nuevo año figura el deseado cambio de gobierno en mi ciudad, para dar paso a un gobierno sin ataduras entre socios y sólo atado a lo comprometido con los lucenses. 

Los cambios de calendario no pueden suponer dejar atrás todo lo que aconteció durante los días que ahora algunos quisieran ver en la papelera y con ello en el olvido. En España la política ha dejado episodios graves que no pueden pasar a formar parte de esas hojas tiradas a la basura, que no pueden quedar en el olvido. Cuando nos toque elegir a las personas en cuyas manos vamos a depositar toda nuestra confianza, no podemos olvidar a quién se debe que maltratadores y violadores se estén beneficiando de las leyes de los que hoy nos gobiernan, o que malversadores de toda condición sean beneficiados por ese mismo gobierno, o que en España salga gratis practicar la sedición, que en el diccionario se define como "alzamiento colectivo y violento contra la autoridad, el orden público…”. Son sólo algunas de las cosas que no podemos olvidar.

Mañana por la noche entrarán en nuestros hogares los Reyes magos de Oriente y en mi carta figura, en primer lugar, una buena salud para todos y que el calendario del 2023 se llene día a día de buenos deseos cumplidos y buenas noticias en las páginas de este Diario. Feliz 2023. 


Calendarios

Ata fai relativamente pouco tempo nos días finais do ano o agasallo de calendarios de parede ou de mesa era un costume xeneralizado que vai cedendo o seu paso #ante a invasión do dixital. Hoxe todos temos calendarios nos móbiles, tabletas, computadores...

Co cambio de calendario dun ano para o seguinte tendemos a pensar que coas follas caducadas tamén se marchan os vellos problemas e as consecuentes preocupacións, de igual maneira que coa apertura do novo calendario do ano que se estrea os novos propósitos ocupan rapidamente os días que veñen por diante.

Comeza 2023 e non son poucos os que vaticinan que será un ano intenso e complicado, onde as diferentes convocatorias electorais propiciarán que a convivencia e o desexado bo clima social véxase máis que alterado.

Tamén os comezos de calquera ano levan consigo listas de incertezas, como todo o que ten que ver con acertar sucesos futuribles. Non son poucos os do 2023. Desde os máis globais como as guerras, en especial a que leva librando moitos meses en Ucraína, ás portas de Europa, ata as repercusións dos novos brotes e variantes do COVID, que vendo as noticias que nos chegan desde China fan que rexurda na nosa memoria todo o que vivimos no 2020.

Pero tamén no noso país as incertezas non faltan. A evolución dos prezos dos alimentos, os combustibles xa sen bonificacións, o futuro do sistema de pensións, os resultados das diferentes xornadas electorais, empezando polas municipais e autonómicas de maio...

E aínda máis próximo, o que poida acontecer en Lugo, onde o actual bigobierno municipal fiarao todo a que o Partido Popular quede ás portas da maioría para volver reeditar os seus pactos. Na miña lista de desexos para este novo ano figura o desexado cambio de goberno na miña cidade, para dar paso a un goberno sen ataduras entre socios e só atado ao comprometido cos lucenses. 

Os cambios de calendario non poden supoñer deixar atrás todo o que aconteceu durante os días que agora algúns quixesen ver na papeleira e con iso no esquecemento. En España a política deixou episodios graves que non poden pasar a formar parte desas follas tiradas ao lixo, que non poden quedar no esquecemento. Cando nos toque elixir as persoas en cuxas mans imos depositar toda a nosa confianza, non podemos esquecer a quen se debe que maltratadores e violadores estean a beneficiarse das leis dos que hoxe nos gobernan, ou que malversadores de toda condición sexan beneficiados por ese mesmo goberno, ou que en España salga gratis practicar a sedición, que no dicionario defínese como "alzamento colectivo e violento contra a autoridade, a orde pública…”. Son só algunhas das cousas que non podemos esquecer.

Mañá pola noite entrarán nos nosos fogares os Reis meigos de Oriente e na miña carta figura, en primeiro lugar, unha boa saúde para todos e que o calendario do 2023 énchase día a día de bos desexos cumpridos e boas noticias nas páxinas deste Diario. Feliz 2023.